Ivaginaria / Pronóstico del clima: empiernable

No sólo en el centro del País las lluvias y el clima frío nos están orillando al empiernamiento en el epicentro de la cama, sino en todos lados ya se sienten las ganas de las buenas almas por meterse bajo una cobija, como si los pretextos nos faltaran.

Debido a las urgentes crisis nacionales en donde se ve que nos tienen bien empinados con las reformas y las carestías de todo tipo, la única alegría verdadera que nos queda es escondernos bajo las mantas para franelear.

En la crónica motelera número dos, que medio les conté, creo que la operación resultó fallida porque no supimos controlar el clima de la habitación, por eso tuvimos que usar el factor cobija después de usar la mal habida regadera transparente en medio de la habitación.

Pero ¿qué hacer para que el empiernamiento de este clima travieso sea verdaderamente efectivo?

Primero, organicen la empiernada como pocas cosas saben organizar en su vida. Aprovechen un asueto de estos huevones días; estírense como si se fueran a ejercitar para no andar tronando las rodillitas en la faena; dejen a los niños a buen resguardo (no los encierren en el clóset y se vayan a follar suci@s); y si tienen casa sola, tómenla, o consíganse un sitio para pernoctar, de esos del centro que no suben más de 500 pesos por la noche. El chiste es quedarse, no se metan a uno de tres horas la echada porque nomás no dejan concentrarse.

Segundo, sírvanse de las ofertas alcohólicas de las fiestas de Independencia, para que se lleven sólo un pomo para chupar...y también para beber. No se pongan locos, sólo chidos. Luego no le atinan a nada.

Tercero, ésta columna fomenta el ocio y el sexo casual y la verdad es que es la única forma de pasar un asueto con estos climas en los cuales Tláloc aprovecha para pasear las pelotas y dejarnos como estamos: con las patitas mojadas todo el tiempo.

Cuarto, como el empierne es maratónico, háganse el favor de cambiarle a la rutina sexual y ponerse retos sexuales: a ver quién aguanta más chupando en un 69; unas retas de fricción anal (igualdad ante todo caballero...); hagan un trío: si hay tiempo para dos, no sería mala idea que hubiera un tres (esto sólo para las almas aventureras que ya han decidido que su cuerpo es patrimonio de la nación y sí es...

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