Irlanda Historias medievales

AutorTayde Bautista

Tres recintos donde ha ocurrido de todo. El castillo Trim, en el condado de Meath, fue el más importante durante varios siglos; el de Malahide, en Fingal, alberga la historia de la familia Talbot, y en el de Dublín fueron encarcelados curas y rebeldes irlandeses.

Castillo de Trim, El más grande

Las ruinas del castillo que rodean a Trim, en el condado de Meath, tienen algo enigmático. Aquí se realizaron algunas de las escenas de la película "Corazón Valiente", dirigida por Mel Gibson en 1994.

El lugar es imponente. En medio del campo verde se eleva la construcción; las torres y el monasterio se encuentran un poco más lejos.

Tal vez el misterio de este sitio es que se ha preservado como ruinas; no es museo, tampoco hotel, restaurante o centro administrativo, y eso hace que conserve un aire medieval.

Es el más grande de Irlanda, y es importante porque fue uno de los puntos militares estratégicos normandos del país.

Se construyó en tres fases. La primera etapa la realizó Hugh de Lacy en 1174, y las otras, en 1196 y 1206, fueron diseñadas por su hijo, Walter Lacy.

Al entrar al complejo se siente un frío que cala los huesos. La piedra parece enmohecida; miro hacia arriba y la fortificación me produce escalofríos, y cuesta trabajo creer que en este lugar vivieron familias enteras, con este frío y en donde corre tan poco aire.

La torre más alta tiene tres pisos. En la parte principal de la estancia se encuentran tres maquetas donde se explican las fases en las que fue construida esta edificación.

El edificio funcionó como el centro administrativo de los anglonormandos, área que perteneció al territorio irlandés impuesto por el Rey Enrique II de Inglaterra, y que señalaba los límites con la frontera de las fortificaciones de los ingleses.

Durante los siglos 15 y 16 el poder de este fuerte declinó y cuando el líder político y militar Oliver Cromwell conquistó Irlanda, el castillo cambió de propietarios. Los Dunsany fueron los últimos dueños, y ellos lo vendieron al Estado en 1993.

Castillo de Malahide: Herencia de los Talbot

Es una tarde lluviosa, la típica de un día cualquiera en Irlanda. Un camino de árboles y hojas otoñales me conducen hacia el castillo de Malahide, en el condado de Fingal.

Me encuentro con un jardín de niños y continúo de frente. Un letrero me indica la dirección: "Malahide castle".

A lo lejos diviso la primera torre. Me acerco y veo una explanada tan verde que parece inverosímil; a lo lejos, observo al castillo, la imagen es tan...

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