Inundan a Tonalá las aguas negras

AutorMargarita Valle

Los cauces naturales por donde corría hace apenas unos años el agua cristalina, filtrada por la tierra y las piedras, son ahora arroyos de aguas negras que atraviesan las principales colonias de Tonalá ante la falta de una suficiente y adecuada infraestructura de agua potable y alcantarillado.

El acelerado crecimiento demográfico le ha costado al municipio el rezago en materia de servicios públicos, como el drenaje y el agua potable, por lo que los habitantes de la Cuna Alfarera han implementado medidas alternativas para cubrir sus necesidades.

Estas opciones no significan algo mejor, sino que se trata de rudimentarios desagües que desde los hogares descargan sus desechos hacia los arroyos aledaños ocasionándoles una fuerte contaminación.

Los cauces de agua limpia y que, incluso, podían ser utilizados ante la falta de agua potable, son inservibles para el consumo humano, y por el contrario son perjudiciales a la salud de los vecinos.

Tonalidades grises, algunos hasta con espuma con pigmento café y verdoso, es el panorama de hoy en los arroyos de la Cuna Alfarera, canales a cielo abierto que atraviesan poblaciones arrastrando con ellos las aguas residuales, basura, llantas y hasta animales muertos.

El Plan de Desarrollo Municipal elaborado por la actual administración tonalteca y aprobado el 16 de mayo del 2002, a un año y medio de iniciada la administración, contempla la descarga de aguas residuales como un grave problema que a pesar de ser públicamente conocido, se desconoce la calidad y volumen de aguas contaminantes que bañan al municipio.

Sin embargo, la existencia de por lo menos 16 afluentes naturales contaminados por aguas negras, refiere el documento, se atañe a la tasa de crecimiento del 11 al 13 por ciento anual, con lo que el servicio de drenaje se queda rezagado de manera significativa, en lugar de disminuir este problema.

Los arroyos de Osorio, Loma Dorada, Santa Paula, La Ladrillera, El Rosario y Coyula, entre otros, son algunos de los cauces contaminados por los desechos de las viviendas, granjas, establos y algunas industrias, especialmente los pequeños talleres artesanales que representan la principal actividad económica del municipio.

Estas corrientes son canales a cielo abierto que circulan entre las colonias, a escasos metros, incluso centímetros, de los edificios multifamiliares de Loma Dorada o las casas del Rosario o Santa Paula.

La cercanía de los desechos, además de la falta de tratamiento de estas aguas...

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