Insomnio: Una larga noche
| Autor | David García-Escamilla |
¿Quién no ha pasado una noche dando vueltas y vueltas en la cama sin poder conciliar el sueño, escuchando el tic tac del reloj, el maullido de un gato o el ulular de una sirena lejana, mientras pasan los minutos que le parecen una eternidad?
Si esto le ocurre sólo de vez en cuando, las consecuencias no serán mayores que somnolencia y bolsas en los ojos al día siguiente, pero cuando la escena se repite noche tras noche, los resultados pueden ser fatales, ya que en ese estado tendrá problemas de productividad en el trabajo o la escuela, o podría causar un accidente de tránsito. No hay que olvidar que la explosión del Challenger y Chernobyl fueron ocasionados por errores cometidos a causa de la falta de sueño.
El trastorno del dormir o insomnio puede ser signo de ansiedad o depresión, incluso, según recientes estudios, puede estar ligado a la represión sexual de quien lo padece.
"El insomnio es un problema clínico, definido por la presencia de uno varios síntomas, como la dificultad para dormir, el aumento en el número de despertares, o hacerlo demasiado temprano, y aumento en el tiempo que se pasa despierto en la cama", indica Harry Baker, vicepresidente de la Academia Mexicana de Trastornos del Dormir.
Uno de cada tres adultos presenta este problema por lo menos una vez al año, y las mujeres lo sufren más que los hombres; también en las personas de la tercera edad aumentan las posibilidades de padecer insomnio, debido a que el patrón de sueño se invierte conforme pasan los años, dice Baker.
"Debe considerarse también a quienes duermen y sienten que no descansan, y los que están somnolientos durante el día, situación que puede durar semanas, meses o hasta años", explica el especialista.
Los niños y adolescentes también lo padecen, los índices de prevalencia desde los seis meses hasta los dos años son de entre 20 y 30 por ciento, y un estudio realizado a niños de entre 6 y 14 años encontró que se presentaba en un 50 por ciento de los pacientes.
Lo que provoca el insomnio
Hay que recordar que el insomnio no es una enfermedad, sino un síntoma de diversas trastornos.
"Entre los factores psicológicos encontramos el estrés persistente en la vida cotidiana, los problemas psiquiátricos, como son la ansiedad y la esquizofrenia; por ejemplo, cuando una persona se despierta más temprano de lo deseado en la madrugada, es un síntoma común de depresión", indica Baker.
En el caso del estrés, la ayuda piscoterapéutica es de gran ayuda, y para los problemas psiquiátricos, el tratamiento se enfoca en la combinación de medicamentos y psicoterapia.
"Ingerir estimulantes como la cafeína, ya sea en café, refrescos o té, interfiere definitivamente en el sueño. El fumar provoca dificultad para dormir profundamente, y a pesar de que una copa de alcohol induce el sueño, cuando se combina con la sangre hace más difícil el descanso. El alcohol también puede dañar al cerebro, por ello, los alcohólicos, aun cuando dejen de beber, sufren para conciliar y mantener el sueño", afirma Baker.
Influye también el desvelarse y despertar tarde en fin de semana, así como los cambios de turnos laborales, el jet lag o viajes rápidos transmeridionales, así como el estilo de vida sedentaria, un problema que aumenta con la edad.
"Otro factor es el insomnio aprendido, en que la preocupación por no haber dormido en noches anteriores no deja dormir por el esfuerzo mismo que se...
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