Inicia como donación; termina subastado

AutorEdgar A. Hernández

El óleo El fumador (1945), de Rufino Tamayo, que el pasado 10 de junio Christie's subastó en París en 439 mil dólares, es una pieza que el Museo de Arte Contemporáneo (Marco) de Monterrey recibió en donación en 1991 y vendió en 1996, a pesar de que era la única obra del oaxaqueño en su acervo.

Coleccionistas y especialistas en Tamayo lamentaron la venta por considerarla una "mala elección" que pone en tela de juicio la administración del museo.

Jaime Rosales, director administrativo de Marco, aseguró que "fue la mejor decisión" que se tomó en ese momento para poder subsanar los problemas financieros del recinto fundado en 1991.

La coleccionista Márgara Garza Sada, quien formó parte del consejo de directores de Marco, dijo que la venta la tomó por sorpresa. "Me salí del consejo junto con Carlos Guajardo, quien gestionó la donación, y jamás nos enteramos de que vendieron el Tamayo, pero me parece una decisión equivocada por parte del museo".

Guajardo recibió en 1991 el óleo, que fue donado por la coleccionista salvadoreña Marta Dueñas de Regalado -fallecida el 7 de marzo de 1994 a la edad de 82 años- para que se integrara a la colección del museo privado que cuenta con un presupuesto anual del gobierno estatal cercano a los 7.5 millones de pesos para su operación.

"Yo le conté (a Dueñas de Regalado) del proyecto de crear el Marco y ella, muy amablemente, me dijo que me podía regalar un Tamayo. Le dije que se tenía que donar directamente al museo y ahora me da mucha vergüenza con la familia ver que esa pieza se estaba subastando en París", dijo.

Juan Carlos Pereda, curador del Museo Tamayo de la Ciudad de México, explicó que legalmente es posible que un museo privado pueda vender obra, pero aclaró que políticamente no es la elección más acertada.

"Ningún museo público puede vender piezas de su acervo y que un museo privado lo haga pone en tela de juicio su administración".

Pereda explicó que para el patrimonio nacional, este Tamayo era igual de importante que el resto de la producción del oaxaqueño. "Si bien forma parte de una serie sobre fumadores que hizo el pintor, tiene peculiaridades que remiten a una época específica y elementos que le agregó a partir de investigaciones plásticas".

Rosales se deslindó de la transacción comercial, al señalar que ocurrió en la administración anterior, pero justificó la venta llevada a cabo por su antecesor, Fernando Treviño, aludiendo a que los recursos obtenidos le permitieron al museo mantener una...

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