Infiel a sus bases

AutorLuis Homero Echeverría

La mitad de los jugadores que Pumas utilizó el pasado domingo en el partido ante el Guadalajara no son canteranos ni nacieron en México.

La esencia que bañó el proceder de la UNAM en sus 61 años de existencia da señales de resquebrajarse ante una política de ceder los espacios a extranjeros y naturalizados hasta llegar a nueve no nacidos en el País con registro en el primer equipo.

Entre los 60 y los 90, y todavía a principios del nuevo milenio, Pumas se caracterizó por defender el material de casa, formar jugadores, debutarlos y más tarde ser un nutriente para otros equipos y la Selección Nacional al darles salida y renovar cuadros con material humano joven e institucional.

Hoy, la escuadra del Pedregal tiene nueve elementos entre foráneos y naturalizados, siete de ellos participaron en el partido contra Chivas y cinco fueron titulares, casi la mitad de la alineación.

En su plantilla que mucho tiempo fue de un 85 o 90 por ciento de nacidos en México y, sobre todo, canteranos, los felinos tienen ahora a los extranjeros Matías Britos, Ismael Sosa, Dante López, Diego Lagos y Francisco Dutari, y a los naturalizados Darío Verón, Daniel Ludueña, Martín Romagnoli y Leandro Augusto.

El torneo pasado, el Clausura 2014, en la Fecha 11 los universitarios usaron ocho no nacidos en suelo nacional con la dirección técnica de José Luis Trejo, el actual entrenador.

Entre 2013 y 2014, otras seis veces utilizaron a siete futbolistas entre extranjeros y naturalizados, cinco de ellas con Trejo como estratega (la otra con Antonio Torres Servín).

La nueva tendencia de Pumas va contra...

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