Prevención indispensable

AutorMaría Silva

Los horarios y las actividades en casa se trastocan con la llegada de un bebé. Los padres se dedican a cuidarlo y alimentarlo, pero es esencial que en esos primeros días también se den el tiempo para consultar con su pediatra acerca de cuándo y qué vacunas se le deben administrar.

La vacunación es el medio más eficaz para prevenir enfermedades que, de no atacarse, podrían incluso ser mortales; por lo mismo, no hay que bajar la guardia.

Aun cuando se les proporciona la Cartilla Nacional de Vacunación, considerada como la segunda mejor en el mundo, después de la que ofrece la Academia Americana de Pediatría, en Estados Unidos, algunos papás prefieren que las aplicaciones queden a criterio de su pediatra.

Esto no interfiere con lo que dicta la Secretaría de Salud, porque los médicos del sector privado combinan las recomendaciones del sector salud nacional y el americano.

"La idea es que empiecen a las 6 semanas de nacido o en el segundo mes, pero se debe tener cuidado entre una dosis y otra, porque las iniciales se deben poner, mínimo, con cuatro semanas de diferencia, o un promedio de cada dos meses", explica Ricaurte Crespo, pediatra y vicepresidente de la Asociación Mexicana de Vacunología.

Las que no deben faltar

El pediatra señala que la primera dosis que se suministra al poco tiempo de nacido es la de la hepatitis B, ya que hasta el 25 por ciento de las mujeres en México que tienen hijos son portadoras asintomáticas de ese virus.

"A los 2 meses, se debe aplicar la DPT (difteria...

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