Impulsor y benefactor de Ciudad Universitaria
Mediante el Patronato Universitario, concebido con autonomía respecto a la Universidad de Nuevo León, se propició el acercamiento con la representación de los sectores comercial, industrial y profesional en la aspiración de contar con mejores elementos físicos y humanos en la casa de estudios.
En sus planes de desarrollo, quehacer científico y humanístico, la Universidad Autónoma de Nuevo León contó por cerca de 40 años con el apoyo d el P atronato U niversitario.
Este organismo público comenzó sus funciones el 14 de diciembre de 1950, mediante el decreto oficial número 66 del Gobierno del estado.
Esta disposición se dio en el marco del apremiante llamado "Señor presidente ¡Nuestra Universidad!", que don Federico Gómez hizo en el periódico El Porvenir para resolver la crítica situación financiera de la institución educativa.
Los esfuerzos por este objetivo común, unieron en el Patronato Universitario a figuras de la industria, la banca y el comercio, así como profesionistas e intelectuales, como Joel Rocha, Manuel L. Barragán, Federico Gómez, Rogelio Cantú, Carlos Prieto, Evaristo Araiza, Manuel Santos, Alfonso Reyes y Nemesio García Naranjo, entre otros.
La esencia institucional del Patronato Universitario estuvo delineada por los objetivos de procurar donaciones, fondos y subsidios para beneficio de la Máxima Casa de Estudios, convirtiéndose en una vía para amortiguar el rezago financiero.
Los donativos económicos y en especie de grandes industrias como Fundidora de Monterrey y Cementos Mexicanos, de empresarios como Luis Elizondo, Gregorio Garza Guzmán y Tomás A. Zertuche fluyeron a la Universidad a lo largo de la década de los cincuenta, convirtiéndola así en beneficiaria de los dineros de la industria, prevaleciendo en la mentalidad del empresariado el interés de la institución educativa.
El Patronato Universitario contribuyó a cristalizar magnas obras como la Ciudad Universitaria, la Torre de Rectoría y el Estadio Universitario.
Pero su apoyo se extendió a la infraestructura académica, al equipamiento de laboratorios, a la adquisición de acervos bibliográficos, al impulso a iniciativas estudiantiles, además de su importante papel en la difusión de la cultura, entre otros medios, con el periódico Vida Universitaria, mismo que desde 1951 y hasta la fecha es el portavoz informativo por excelencia de la Universidad Autónoma de Nuevo León.
El Patronato Universitario simbolizó hasta su término, el 16 de febrero de 1987, la unidad de la...
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