Impulsan autonomía en el autismo
A donde vaya, Santiago Curiel lleva consigo unos tachones amarillos autografiados por la futbolista Diana González, fallecida en 2019.
Para el chico de 26 años, quien vive con Trastorno del Espectro Autista (TEA), son un recordatorio de que puede cumplir lo que se proponga, en especial, su más grande sueño: ser periodista deportivo de fútbol.
"Si alguna vez llego a pensar que no voy a lograr algo, (veo) estos tenis", expresa Santiago, radicado en Mérida, Yucatán, y de visita por primera vez en Monterrey.
"Siempre viajo con ellos porque son una muestra de que puedo llegar a (lograr) algo importante, si yo quiero".
Al preguntarle qué lo trae a la Ciudad, ríe y sugiere que lo mismo que a muchos otros: Lionel Messi, a quien admira por sus habilidades en el fútbol.
No sólo vino a ver el juego del miércoles por la noche, en el que Rayados venció al Inter Miami: también a hacer la cobertura periodística para su página digital, tal como lo ha hecho desde hace ya algunos años con otros equipos del País.
Santiago es ejemplo del crecimiento personal y autonomía que pueden alcanzar las personas dentro del espectro cuando se trabaja con ellas desde un enfoque del desarrollo humano, señala Guillermo Vela, fundador en el 2004 de la asociación regia Autismo ABP.
"Cuando nos enfocamos en ellos y vemos qué es lo que les interesa, empezamos a encontrar un camino para ellos", apunta.
El autismo o trastorno del espectro autista (TEA) es una afección del desarrollo del cerebro que afecta la forma en que una persona percibe y socializa, lo que causa problemas en la interacción social y la comunicación, y se le llama espectro porque a todos afecta de manera diferente.
Abril es el Mes Nacional de Concientización sobre el Autismo, que no es una enfermedad ni existe una cura.
Los tratamientos están enfocados a mejorar las áreas en las que existe mayor dificultad, sin embargo, indica Vela, es común que la intervención se limite sólo a que aprendan a realizar ciertas tareas que les permitan integrarse a la sociedad.
Pero así como suele ocurrir con personas con discapacidad, se olvida que son seres humanos con intereses propios, deseos y autonomía.
"Lo que sucede comúnmente es que queremos que sean funcionales para nosotros, pero no nos interesa qué es lo que ellos quieren", apunta.
Esto afecta mucho más a los chicos dentro del espectro que no han desarrollado una comunicación verbal, destaca, pues no pueden expresar lo que desean y muchas de las decisiones en su vida...
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