Iguales ¿o no tanto?

No importa el día que sea, a Juan siempre le duele la cabeza, el estómago o la espalda. Adelante de él está María, quien trata de que no se le vaya ni un solo detalle de la clase y toma apuntes hasta de lo que no le piden.

En otra fila está Karla, quien siempre sonríe, le cae bien a todos y si se trata de organizar alguna fiesta, viaje o trabajo, es la primera que salta para hacerse cargo.

Arturo se sienta en el último lugar de la fila para poder hacer lo que quiera sin que el maestro lo vea. En otro asiento está José, el número uno del equipo de futbol del colegio.

Y así, dentro de un salón de clases cada niño es un mundo, con su actitud ante la vida y personalidad.

Lo más importante es que el maestro conozca a cada alumno y lleve un registro anecdótico para detectar si su conducta es natural o se da por alguna situación en casa, explica Josefina Cruz, psicóloga clínica infantil.

"Nosotros como maestros tenemos que estar preparados para todos esos tipos de personalidades", dice Cruz.

Para integrarlos, la especialista recomienda llevar a cabo con frecuencia dinámicas donde se puedan fomentar los valores.

En general, éstas son las personalidades que más suelen aparecer en un salón de clases.

De todo y para todos

Estas son las personalidades que más suelen aparecer en un salón:

EL DEPORTISTA

Los papás deben tener precaución para no saturar a sus hijos con clases extracurriculares con la idea de que destaquen en algún deporte que ellos no pudieron practicar. También debe haber un balance porque a veces no cumplen con las tareas en la escuela, pero se sienten protegidos por su talento en el deporte.

"Si mi hijo está en un equipo de la escuela, pero le está yendo mal en calificaciones tenemos que saber qué es prioritario", enfatiza Josefina Cruz, psicóloga clínica infantil.

EL APLICADO

La psicóloga Mary Ramírez comenta que hay ocasiones en que los niños tienen el compromiso de ser perfectos en la escuela para agradar a un miembro de la familia, y por no decepcionarlo siempre buscan ser excelentes, olvidándose de socializar.

"A veces cuando realmente no es tan inteligente, pero se está esforzando mucho porque en casa lo presionan de más, el niño no va a ser feliz, por esa razón es bastante importante tener esa comunicación con los papás", enfatiza Cruz.

EL ESTIRADO

Cuando un niño carece de suficiente seguridad en sí mismo, asume otra personalidad para guardar las apariencias, como considerarse superior al resto de sus compañeros por las...

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