Idean su propia historia

AutorVanessa Rivas

La imaginación y la actitud fantasiosa de los niños es uno de los principales motores para que caigan fácilmente en el juego de las mentiras, en el cual ocultar acciones incorrectas o crear historias ficticias, es el común denominador.

En ocasiones es frecuente que por su corta edad los niños confundan la realidad con la fantasía, sobre todo en sus primeros años de vida, explicaron especialistas en atención infantil.

"Que los pequeños mientan es algo común sobre todo cuando son muy chicos, entre 2 y 5 años, porque tienden a crear historias imaginarias de superhéroes o dibujos animados, lo que hasta cierto punto es inofensivo", aseguró María Teresa Ochoa, coordinadora del Centro de Atención Infantil, en Tlalnepantla.

Destacó que cuando los niños son más grandes y tienen un estado de consciencia más definido al reconocer entre lo qué está bien y lo que está mal, los padres deben poner mucha atención para evitar que las falacias se vuelvan parte de la vida de sus hijos.

Imaginar cosas, el deseo de llamar la atención, de ser aceptados en su núcleo social, evitar un castigo o buscar un beneficio, son sólo algunos motivos por los que los niños mienten a sus padres.

"Los pequeños son muy listos y cuando saben que hicieron algo que está mal, el miedo a una reprimenda los lleva a mentir", señaló Ochoa.

Otro factor que influye en los niños es la manipulación hacia sus padres, en el que a través del chantaje tratan de obtener lo que desean, ya sea un objeto o no ir a la escuela.

Al respecto, la psicóloga aseguró que los dolores de barriga, el zapato apretado y las enfermedades matutinas se usan para manejar a los papás, quienes se dejan influenciar.

"Es increíble que una personita tan joven pueda manejar así a dos adultos, y es que cuando está de por medio un juguete, dulces o no ir a la escuela, las lágrimas y las actuaciones de dolor y enfermedad se ponen a la orden del día", afirmó.

Papás mentirosos

Sin embargo, no toda la responsabilidad recae en los niños; madres y padres de familia contribuyen en gran medida a que los hijos cometan estas faltas a la verdad, al ser ellos mismos quienes las propician.

Rosa María Castellanos, directora de la estancia Estimulación y Aprendizaje Infantil en Naucalpan, indicó que en ocasiones los padres hacen creer historias nocivas a sus hijos para condicionarlos con el fin de que realicen algo.

"Cuántas veces hemos escuchado a adultos decirle a los niños que si no se duermen irá el coco, que si no hacen la tarea un...

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