Demandan ayuda humanitaria para desplazados guatemaltecos

(Embargada para sitios en Internet hasta las 24:00 horas locales)TENOSIQUE, Tab., diciembre 10 (EL UNIVERSAL).- La adversa situación en que sobreviven las familias guatemaltecas refugiadas sobre la brecha que conforma la línea divisoria México-Guatemala, se agudizó al enfrentar ahora problemas con pobladores y autoridades de Tenosique por el uso del agua potable, denunció Fray Tomás González Castillo, presidente del Centro de Derechos Humanos del Usumacinta (CDHU).El martes 23 de agosto, elementos del Ejército y Policía Nacional de Guatemala, junto con autoridades otras instituciones chapines, desalojaran a las 91 familias de la Aldea Nueva Esperanza, Peten, quienes huyeron hacia México y se asentaron en improvisadas chozas de plástico sobre la línea internacional, junto al ejido fronterizo Nuevo Progreso de este municipio mexicano."No tienen agua potable, pues el gobierno municipal que encabeza el perredista Raúl Gustavo Gutiérrez Cortés no ha atendido el llamado que hizo la comunidad a través de personal de este Centro de Derechos Humanos", dijo el sacerdote católico, quien se ha puesto al frente de la defensa de estas familias desplazadas.Señaló que el alcalde de extracción del PRD optó "por hacer caso al Delegado Municipal de Nuevo Progreso y al Jefe de Sector de esa región quienes siguen criminalizando a los desplazados y han dicho que impedirán cualquier ayuda a la comunidad".La población de Nuevo Progreso es solidaria con sus vecinos temporales, pero no así las autoridades comunales que han empezado a hostigarlos al acusarlos de delincuentes, afirmó el también defensor de migrantes.Acusó también a la Cruz Roja de Tabasco que se ha desentendido de...

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