Hugo Hernández / Zapata pop

AutorHugo Hernández

Napata para principiantes, Zapata entre las nubes como agua para chocolate, Zapata para la televisión, Zapata para la radio, Zapata en un videoclip de casi dos horas: Zapata pop. Porque "sólo venimos a soñar" nos dice la nahual chamánica que ilustra y guía al temeroso e ignorante revolucionario. Porque en la visión de Alfonso Arau la vida es sueño y el héroe de ensueño: Zapata, el Sueño del Héroe (2004).

La más reciente entrega de Arau se autopostula como un acercamiento quasi-onírico a la personalidad del "caudillo del sur". Es un México imaginario, devastado, ruinoso (todos los escenarios son edificios en ruinas, y se "visten" para cada ocasión: Palacio Nacional, Sanborn's, etc.) el que recibe al neonato Emiliano, llamado a ser el Mesías de la mexicanidad profunda, el hombre de maíz, el encendedor portátil del anhelado sexto sol náhuatl.

A los 10 años es testigo de la humillación que su padre sufre a manos del cacique local y del Victoriano Huerta (Jesús Ochoa) nacional, villano por antonomasia y justeza. En venganza, el niño de los caballos le juega una mala pasada a Huerta: sus poderes sobrenaturales se manifiestan mediante un guiño al equino, quien se alebresta y tira a aquél al suelo. Pero las tierras se pierden, de cualquier forma. Así fue la Historia que nos recuerda esta historia.

Diez años después, a Emiliano (Alejandro Fernández) sólo le apasionan "las viejas y los caballos", por lo que hay que recordarle que así no pasará a la Historia: su pueblo lo nombra líder y entonces se lanza a encabezar lo que él precozmente ya sabe que es una Revolución. Pronto goza de la simpatía popular (¿por sus apariciones en los palenques?) y el "indio patarrajada" (y quemada, pues lo martirizan como a Cuauhtémoc, de quien es supuesto sucesor), llegará a ser lo que la mitología mexicana ya registra: el héroe de la tierra-es-de-quien-la-trabaja.

Película cantante y a caballo: "porque las canciones quedan y la gente se va" le dice un Villa más preocupado del billboard que del curso de la Revolución a un desconcertado Zapata-cantante en un Sanborn's regenteado por Carmen Salinas. ¿Por eso Lucerito canta y el Potrillo canta y Camil canta? Ahora que lo cuestionable no es que canten ni quién cante, sino la gratuidad en el...

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