Hugo Hernández / La felicidad posible

AutorHugo Hernández

Apenas inicia la proyección y ya es preciso despedir a un joven que en Estados Unidos habrá de buscar mejor fortuna. Su novia lo despide con la expectativa de unírsele apenas haya un trabajo por allá. Los jóvenes se van porque ahí no hay futuro para ellos. ¿Son mexicanos al grito de guerra? No. Son checos.

Parecido a la Felicidad (República Checa/Alemania, 2005) arranca con la desesperanza a cuestas. Monika (Tatiana Vilhelmová), la novia, desesperada esperará noticias del novio. Toník (Pavel Liska), viejo amigo y secreto enamorado de ella, hace proyectos en el taller de la tía. Ambos tienen afecto por los niños de una vecina que está obsesionada con un hombre casado. Las crisis constantes de ésta la llevan al hospital, y sus dos infantes sufren el abandono consecuente. Es entonces que Monika y Toník salen al quite y acogen a los niños. El núcleo así conformado se asemeja a una familia, y la convivencia a algo parecido a la felicidad, como tiene a bien anticipar el título. No hay euforia: es pura cotidianidad: es un accidente feliz.

El cine checo, como el de los países que giraban en las órbitas satelitales soviéticas, tradicionalmente ha sido crítico y cálido. En Parecido a la Felicidad, su segundo largometraje, Bohdan Sláma deja ver que es un brillante heredero de esta tradición. A partir del esbozo de situaciones cotidianas da cuenta del alcoholismo, de la urbanización e industrialización ambientes, que han terminado con la convivencia familiar y abren una infranqueable brecha generacional. En resumidas cuentas, la cinta da cuenta de la deshumanización de los habitantes que aún llevan a cuestas los nefastos...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR