Hollywood y su 'extreme makeover' a la historia
| Autor | Doly Mallet |
Pareciera que las tramas interesantes no son suficientes para Hollywood.
Deben ser protagonizadas por gente bonita, pues si no, no venden.
Bajo ese parámetro, el cine norteamericano ha decidido contarnos capítulos de la historia mundial con actores que poco se parecen a los personajes que representan y que, normalmente, los superan por mucho en belleza.
Echemos un vistazo a las enciclopedias y comparémoslas con la pantalla.
¿CUÁL PARECIDO?
ENRIQUE VIII
Interpretación: Eric Bana en The Other Boleyn Girl (2008); Jonathan Rhys Meyers en la serie The Tudors (2007-2008); Richard Burton en Ana de los Mil Días (1969) y Charles Laughton en La Vida Privada de Enrique VIII (1933).
Según las pinturas, el rey inglés tenía un gran sobrepeso, poco pelo -que cubría con sombrero- y abundante barba roja. El pegue que tenía con las mujeres no era precisamente por su belleza, sino por su poder.
Sin embargo, lo interpretan dos máximos galanes del cine.
Uno de ellos es el australiano Bana, quien conquistó al público femenino en Troya (2004), y que apareció el año pasado en la revista Empire como una de las 100 estrellas más sexys.
Aún así, su caracterización al menos intenta ser similar al monarca. Rhys Meyers, en cambio, tiene como único interés aparecer sexy y con un cuerpo atlético que muestra durante gran parte de la serie, al aparecer sólo en ropa interior.
Ni se pone barba, ni tapa sus ojos claros con lentes de contacto, ni subió de peso. Está bien que sea modelo de Hugo Boss y que haya interpretado a un seductor en La Provocación (2005), pero entonces que no nos hable de historia.
Preferible el personaje de Burton, que se apega más al Lord de Irlanda, pero aun así lo favorece bastante.
Definitivamente, el más acertado es Charles Laughton. Él sí es casi como el vivo retrato del famoso monarca.
CLEOPATRA
Interpretación: Elizabeth Taylor en Cleopatra (1963)
Según las esculturas, grabados y descripciones, la reina egipcia era sin duda muy hermosa.
Pero era precisamente egipcia, por lo tanto tenía piel morena y ojos oscuros. No era extremadamente blanca con ojos color violeta.
DAVID ALFARO SIQUEIROS
Interpretación: Antonio Banderas en Frida (2002) y Salvador Sánchez en Frida, Naturaleza Viva (1986).
Es obvio que Salma Hayek quería darle algún papel a Banderas en su producción, y el único que encontró disponible era el del muralista chihuahuense. ¿O en qué les viste el parecido, Salma, en que son latinos y morenos?
Mejor Salvador Sánchez en la versión...
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