Historia de la 'Catrina'
| Autor | Mariana Escobar Salgado |
| Cargo | Licenciada en Comunicación, servidora pública adscrita al Centro de Estudios de la Codhem |
| Páginas | 15-16 |
15Acordes y letras
La mayoría atribuye la imagen de la Catrina al pintor
mexicano José Guadalupe Posada, no obstante, este
icono ha sufrido diversas variaciones desde su crea-
ción: durante los gobiernos de Benito Juárez, Sebastián
Lerdo de Tejada y Porfirio Díaz se popularizaron los
di-
bujos de cráneos y esqueletos que junto a textos c
ri-
ticaban de forma burlona la situación del país; los
pri
ncipales medios de difusión de éstos era la prensa,
en donde se reproducían calaveras vestidas con ropas
de gala, bebiendo pulque, montadas a caballo, en fies-
tas de la alta sociedad o de un barrio… todas para re-
tratar la miseria, los errores políticos, la hipocresía de
una sociedad, como es el caso de la Catrina.
Ba
utizada originalmente como la Calavera Garbancera,
José Guadalupe Posada realizó un grabado en metal para
criticar
a quienes eran conocidos precisamente como
garbanceros, es decir, aquellas personas que tenían
sangre indígena pero pretendían ser europeos, rene-
gando de sus raíces y de su cultura. Así, la calavera de
Posada no tiene ropa, sólo un sombrero, su autor criti-
caba a aquellos que querían aparentar un estilo de vida
que no les correspondía.
No cabe duda de que la obra de Posada influyó en artis-
tas posteriores, entre ellos a Diego Rivera, quien le dio
a la Catrina el nombre y la forma con que hoy la co-
nocemos. Fue él quien la pintó por primera vez vestida
dentro de su mural Sueño de una tarde dominical en la
Alameda Central.
La muerte es democrática,
ya que a fin de cuentas,
güera, morena, rica o pobre,
toda la gente acaba siendo calavera.
José Guadalupe Posada
Historia de la
Mariana Escobar Salgado
Catrina
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