Heridas que no sanan

AutorOsvaldo Robles

Fotos: Enrique Zamarripa

Las heridas de la guerra sin cuartel entre narcos no sanan. Persisten como testigos mudos de un mal que azota al Estado. Bardas de colonias convertidas en paredones de fusilamiento, fachadas de residencias destrozadas por miles de balazos, antros con banquetas pintadas de sangre y ruinas convertidas en altares para víctimas inocentes. Estigmas de una Ciudad marcada por la peor violencia que haya padecido en su historia. No son leyendas urbanas, detrás de cada una de estas escenas del delito hay, desafortunadamente, historias tan reales como atroces.

SABINO GORDO

Así luce ahora la fachada de este antro que fue atacado el 8 de julio del año pasado por un grupo armado que irrumpió y baleó a unas 25 personas, de las cuales murieron 21.

VALLE DE LAS BRISAS

Tapizada de balazos de alto calibre y atrapada por el abandono y los vándalos permanece esta residencia que fue escenario del choque entre narcos el 19 de julio del 2010.

CAFÉ IGUANAS

Casi intactos lucen los daños en la fachada de este antro del Barrio Antiguo que fue rafagueado el 22 de mayo del 2011 por un grupo armado que ejecutó a cuatro personas y lesionó a cinco que se encontraban en la puerta.

CALLE HIDALGO

Huellas de un levantón a balazos ocurrido el año pasado permanecen...

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