Hachazos

El que a lengua mata

Bien dicen que "el que a lengua mata... a lengua muere"... ¿o era a hierro?

Lo cierto es que Hugo Sánchez ha comenzado a sufrir con Tomás Boy, lo mismo que él le hizo a Ricardo La Volpe en la atribulada faceta del argentino como director técnico de la Selección, que a final de cuentas le sirvió al futbol mexicano para dos cosas.

  1. Para nada.

  2. Para nada.

Y no es que "El Jefe" sea particularmente amigo del "Bigotón" o algo por el estilo, para nada, sino que la antipatía mutua que se profesa con Ego Sánchez va más allá, y en la primera oportunidad le atizó con la misma pasión con la que le pegaba al balón en los tiros libres cuando era jugador.

Tomás tenía razón... en ese momento. A como se veía el asunto, Huguito había llevado a pasear a Ciudad Juárez (la frontera más hermosa del mundo... de día, porque de noche no responden, o al menos eso dicen ellos) a Jorge Hernández, a quien habría retachado el lunes, perjudicando al Atlas de contar con su contención para el partido de Morelia.

Pero resulta que otra vez la famosa secretaria de la FMF hizo de las suyas y todo era un malentendido por un correo electrónico enviado con errores.

Como quiera Tommy-Boy ya le había atizado al "Pentapichichi", acusándolo de obrar de mala fe y dejándole claro que no era el dueño de los jugadores, algo que otros entrenadores han comentado en más de alguna ocasión, pero que nadie se había atrevido a decir frente a las grabadoras.

Pero esta antipatía ya lleva años. Tomás fue uno de los primeros en protestar en las concentraciones previas a México 86 por los privilegios que Bora Mibatimovil le concedía a Huguito -quien si ahora no es la sencillez andando imagínenselo en ese entonces que era el mejor goleador del mundo-, como abandonar la concentración para ir a Los Ángeles a firmar comerciales.

Los que estaban a favor del "Pentapichichi" en ese grupo aseguran que Boy, quien era el ídolo de las multitudes en aquel Equipo-Tricolor-Tiene-Mucho-Corazón hasta antes de la llegada de Hugo de España, no soportaba...

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