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Gustavo Fondevila / El robo de autos

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Vincent
AutorGustavo Fondevila

Recientemente, el Gobierno de la Ciudad de México ha instalado sensores viales en arcos metálicos de avenidas como Vértiz, Acueducto, Ticomán y Alta Tensión para detectar autos robados o que hayan sido usados en delitos. El sistema entrará en operaciones en aproximadamente 15 días. Se trata de la respuesta más directa al sensible aumento del robo de autos en el DF y sobre todo, al descubrimiento de un alarmante número de autos que han sido "legalizados", es decir, que después de haber sido robados se consiguieron placas nuevas, tarjetas de circulación y hasta tenencias. Según REFORMA, el 60 por ciento de los autos robados reingresan al sistema de manera "legal". Si se calcula entonces que en el año 2011, la Procuraduría abrió 19 mil 167 averiguaciones previas por robo de vehículo (PGJDF) -alrededor de 52.5 por día- se puede suponer que 11 mil 500 de esos autos robados circulan libremente por la Ciudad. Y esto es escandaloso porque es imposible alcanzar semejante nivel de "blanqueo" sin contar con el apoyo interno de grupos que operan en las instituciones del propio Estado (Setravi). El porcentaje es tan alto que no se trata de una banda menor con algunos contactos, sino de una organización completa que trabaja desde el Estado al servicio de actividades criminales. No es un funcionario aislado que se robó un sello de goma. Es una organización delictiva integrada al sistema. Y las ganancias económicas son simplemente brutales: si piensa que en promedio el valor de un auto robado es de 80 mil pesos, el monto total aproximado es superior a los mil 500 millones de pesos y el 60 por ciento indetectable de esa cantidad, asciende a casi mil millones de pesos. No son monedas y por este motivo, hay tantos involucrados (dentro y fuera del Estado). Si a eso se suma, el presupuesto destinado en la Procuraduría y la SSP a este delito y el invertido en las otras instituciones vinculadas (Setravi, Repuve, etc.) se nota de inmediato que el habitante de la Ciudad pierde por todos los costados: porque le roban el auto directamente o bien, porque paga impuestos que van a la basura (alrededor de mil 500 pesos anuales per capita).

LA PROCURADURÍA

Pero hay más -como siempre. Porque este sistema delictivo necesita otras ayudas. Y las tiene. El Registro Público Vehicular (Repuve) que pasó de ser un registro mercantil (y fiscal) a uno de seguridad...

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