Guillermo Velasco Barrera / De expectativas y desencantos

AutorGuillermo Velasco Barrera

Los anuncios por parte del equipo de AMLO sobre las acciones que emprenderá el nuevo gobierno federal a partir del próximo 1 de diciembre no han cesado, ya sea la propuesta de la Ley de Amnistía, los recortes salariales a la burocracia, las medidas de austeridad, las acciones para garantizar el acceso de todos los jóvenes a la educación universitaria, entre otros.

El virtual Presidente sigue fijando la agenda mediática en México, lo cual es explicable, en primer lugar, por su contundente victoria, pero igualmente por la gran expectativa que genera, no sólo en nuestro país sino más allá de nuestras fronteras, la gestión que tendrá el nuevo Gobierno.

De momento sigue la luna de miel, cuando la boda ni siquiera se ha llevado a cabo. Existe esperanza en muchos y en otros, incertidumbre. Hay quienes señalan que debemos conceder el beneficio de la duda a quien tras 18 años de estar en campaña será investido en breve como el Presidente de todos los mexicanos.

Muchos que eran críticos de Morena durante la campaña han cambiado ahora su discurso, lo anterior tiene una parte positiva, pues unos son los tiempos de contienda electoral y otros los del ejercicio de Gobierno, lo que implica el respeto institucional a las autoridades democráticamente electas. Lo anterior, sin embargo, no implica dejar de criticar y señalar a nuestros gobernantes cuando sea necesario, lo cual es esencial en cualquier democracia.

Dicha crítica cabe desde ahora, pues finalmente lo que proponen hoy quienes gobernarán en breve, tendrá implicaciones muy importantes para el futuro. Comento lo anterior, porque muchos cuestionan el que se critique al nuevo Presidente, con el argumento de que ni siquiera ha comenzado y califican como "ardido" por la derrota a todo aquel que tiene el "atrevimiento" de discrepar con la nueva clase gobernante o con alguna de sus propuestas.

Lo anterior en todo caso es inevitable, pues la política tiene un componente emocional muy fuerte, y la polarización social está muy lejos de haber terminado tras las elecciones. El éxito del nuevo gobierno es algo deseable. Creo que todos estamos de acuerdo en lo anterior, pero ello no significa la ausencia de debate y contrapesos para exigir resultados y para procurar equilibrio en la forma en que Morena ejercerá el...

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