Guerra convertida en arte
| Autor | Jesús Pacheco |
El artista conceptual Mateo Maté (Madrid, 1964) ha sido descrito como un activista del humor que suele utilizar la falsa inocencia para pedir cuentas y desengañar, utilizando referentes que todos conocemos. En su trabajo reciente hay desde uniformes militares utilizados como tapices para sala y juguetes cuya inocencia ha sido mancillada por la paranoia, hasta paisajes tomados de la pintura realista del siglo XIX recreados exclusivamente con la paleta de colores que dictan los diseños de camuflaje.
Sin duda, su obra suele despertar sonrisas cómplices. Maté explica: "Trato de introducir un toque de parodia, de ironía, tanto hacia la superproducción comercial del mundo del arte como hacia la mercantilización de la mirada. Las obras se convierten en campos de juego, a través de los cuales se construye una aproximación poética y dinámica a los objetos. Con este proceso, también se hacen ver las formas de control y de coerción que, de forma tan sutil, operan en nuestro mundo".
Un ejemplo paradigmático de su manera de subrayar esas maneras de control y coerción es Disneyworld, una pieza perteneciente a su serie Máxima Seguridad del 2006. Consiste en un castillo de poco más de dos metros de alto por metro y medio de ancho y de largo, construido con piezas armables. Propiamente se trata de un juguete. Pero las almenas, torres, pasillos, balcones y escaleras miniatura son vigilados por un sistema de circuito cerrado que convierte al espectador en improvisado policía, quien no atestiguará otra cosa en los monitores más que la calma persistente de un sitio inhabitado.
Ese castillo intervenido que diera a conocer en Arco 2006 es una clara alusión a Estados Unidos, su paranoia y su obsesión por la seguridad llevada al extremo, incluso en contextos donde la prevención resulta inútil. Con instalaciones como ésa, Maté pone en evidencia sus preocupaciones.
"En una sociedad dominada como nunca por 'los brutos', los hombres sensibles, los artistas, nos sentimos preocupados por el mal y la injusticia del mundo. Procuramos enmendarlas, pero primero en donde se manifiestan más cercanas, en nosotros mismos y en nuestro entorno más inmediato. Los artistas sólo podemos modificar y comunicar nuestro concepto del mundo, que es como modificar el mundo para nosotros", sostiene Maté.
Su método pareciera ser mirar la realidad a través de la ironía, esa que, llevada con responsabilidad, logra convertirse en un acto político, en herramienta crítica. Maté dice trabajar con sus realidades más próximas, en las que puede estar seguro de que los acontecimientos suceden, para entonces proponer nuevas formas de mirar.
"Una de las funciones...
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