Guadalupe Loaeza / Todos somos soñadores

AutorGuadalupe Loaeza

Yo sueño; tú sueñas; ellos sueñan... todos soñamos... especialmente aquellos inmigrantes sin papeles que llegaron a Estados Unidos cuando apenas eran unos niños. Lo más probable es que en seis meses sean deportados a un país que ni conocen, ni mucho menos hablan su idioma: México. Basta con leer algunos de los tuits que muchos de ellos le dedicaron al "hombre anaranjado", y al hombre que no sabe de sueños, Donald Trump: "Trabajo en tres empleos para pagar mi colegiatura. Estudiante, editor web y host en un restaurante. No había estado en una escuela durante 10 años hasta que llegó #DACA". "Soy un soñador, no soy un criminal, yo valgo. No estoy hablando por nadie más, soy americano y merezco estar aquí". "Donald Trump, estoy a 2 semestres de conseguir mi Licenciatura en Tecnología de Información bajo una beca completa que me gané gracias a mis méritos #DACA". Como escribiera Obama: "Estos dreamers son estadounidenses en su corazón, en sus mentes, en todos los ámbitos, menos en uno: en papel". Esto a Trump lo tiene sin cuidado. Entre más baja su popularidad incluso en su partido, más necesita consolidarse frente a sus votantes, haciendo realidad las promesas que hizo en campaña.

Los dreamers ya salieron a la calle, ya gritaron en Nueva York: "¿Sin DACA?, ¡sin miedo!". En Washington, muchos lloraban frente a la Casa Blanca. Se les veía indignados, devastados, con mucha ira en sus corazones. Saben que si regresan a México, tienen que aprender el idioma, encontrar un trabajo o probablemente, volver a la escuela. Saben que si se quedan en Estados Unidos, regresarán a las tinieblas. Y saben que en el país de sus padres, las cosas andan muy mal, que todo se inunda con las lluvias. Saben de la corrupción de México y saben que por acá no hay muchas oportunidades. "No human being is illegal", decía un cartel sostenido por una joven no mayor de 20 años. Encima de que se sienten en la mira y totalmente desorientados, muchos manifestantes fueron arrestados frente a la Torre Trump. Por más que se tomaban de las manos, como cuidándose unos a otros, la policía les ponía las "esposas" para llevárselos. "Seamos claros. La acción adoptada hoy no era requerida legalmente. Es una decisión política y una cuestión...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR