Guadalupe Loaeza / Los renacidos
| Autor | Guadalupe Loaeza |
Queridos Alejandro (El Negro) y Emmanuel (El Chivo):
Me permito dirigirme a ustedes como "renacidos". No porque no estén, desde hace años, más vivos que nunca, sino porque de alguna manera contribuyen, especialmente en lo referido a las artes, a que México renazca. Sí, el domingo en la noche al escuchar sus respectivos nombres en los premios Óscar por The Revenant, sentí que ambas estatuillas le daban oxígeno a un México enfermo, agotado, mancillado, violentado, corrompido y sumamente des-pres-ti-gia-do (y por añadidura con influenza). Con su renovado triunfo, a partir de ahora, cuando se hable de nuestro país, no nada más se referirán a la corrupción, a la impunidad, a los desaparecidos y a la falta de derechos humanos. Le pese o no al imbécil de Donald Trump, en la realidad de México también existen aspectos positivos, como su historia, su gastronomía, etcétera, etcétera, etcétera. Siempre he pensado que existe un talento, una creatividad y una pasión muy a la mexicana. Ustedes nos lo han demostrado con creces, nos han manifestado que cuando se tiene fe en sí mismos, se pueden lograr las cosas más inimaginables del mundo, como por ejemplo una batalla campal entre un ser humano y un oso enfurecido de más de media tonelada. Cuando se tiene así de kilos de fe en lo que uno cree y en lo que se emprende, uno es capaz de ganar el Óscar tres años seguidos. Con razón se dice que la fe mueve montañas, como las que movió Iñárritu, cubiertas de nieve para que Lubezki pudiera retratarlas con la luz del día. Esta misma fe los hace desear, como deseamos millones compatriotas, un país mucho más justo, cuyos gobernantes no construyan mansiones o compren aviones, como el presidencial con valor de unos 218 millones de dólares. (El otro día soñé, se los juro, que había servido para un viaje de la Primera Dama a Miami con sus hijas y las de Peña Nieto. Entre los asientos vi torres de bolsas de tiendas de súper lujo como: Sephora, Neiman Marcus, Carolina Herrera y Ferragamo). Estos gobernantes no sacan premios como ustedes, sino que sacan dinero, prebendas y salarios que ni los directores de Hollywood con todo y sus comisiones.
Ayer por la mañana, nuestro periódico amaneció con un encabezado que me encantó: "Hacen historia", decía en grandes letras debajo de una fotografía en donde aparecen los tres, incluyendo a DiCaprio por mejor actor, con su respectiva estatuilla en la mano. Se ven radiantes, renacidos, renovados y hasta rejuvenecidos. Gracias a ustedes y...
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