GLOSAS MARGINALES / Reforma mediatizada
| Autor | Everardo Elizondo |
La reciente iniciativa del Ejecutivo federal para reformar la Ley Federal del Trabajo tuvo la categoría de "preferente", lo que quiere decir que el proponente pidió al Legislativo que le otorgara atención prioritaria y expedita. Se trataba de una propuesta muy ambiciosa sobre un asunto extremadamente complejo -cuando menos para un lego en la materia, como yo. Así pues, me resultó sorprendente que la comisión dictaminadora de la Cámara de Diputados cumpliera con su tarea dentro del plazo legal de 30 días naturales.
El resultado ha sido calificado de positivo por muchos analistas y, desde luego, por algunos de los agentes económicos directamente interesados. Al mismo tiempo, y como era de esperarse, ha recibido también numerosas críticas -de tirios y troyanos. Entre los críticos hay quienes lamentan la propuesta original y hay quienes deploran sus cambios, y hay quienes derivan de ello conclusiones pesimistas sobre el futuro de la política económica en el sexenio por venir.
En particular, creo que los juicios negativos se centran en lo tocante al gobierno de los sindicatos. A este respecto, el texto inicial decía que la elección de la directiva debería ser "mediante voto libre, directo y secreto". En su lugar, el dictamen aprobado dice que los estatutos "considerarán... el procedimiento para su elección el cual salvaguardará el libre ejercicio del voto". No se necesita ser un experto en materia jurídica para notar que la modificación "le quita los dientes", por así decirlo, a la propuesta presidencial. En palabras llanas, deja al arbitrio del sindicato la fórmula para elegir a los dirigentes: el que quiera usar una forma democrática de veras puede hacerlo, pero no es obligatoria.
Otro tema polémico atañe a la rendición de cuentas. La iniciativa planteaba la obligación de "rendir a la asamblea cada seis meses... cuenta completa y detallada de la administración del patrimonio sindical... (con los) resultados dictaminados por un auditor externo". En contraste, el documento de la dictaminadora dice que las reglas para la rendición de cuentas "considerarán" (!), entre otras cosas, la época para la presentación de cuentas, la forma en que se revisará la información y los responsables de la misma, y las consecuencias aplicables "a los integrantes de la directiva... por incurrir en malos manejos del patrimonio". Otra vez, en lenguaje común, el cambio deja el asunto a la entera discreción del sindicato, incluyendo en ello las consecuencias de los...
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