GLOSAS MARGINALES / Ascenso (¿inexorable?) del gasto público
| Autor | Everardo Elizondo |
Ninguno de los aspectos negativos que caracterizan actualmente a las finanzas públicas de México hubiera sorprendido a James M. Buchanan (1919-2013), un distinguido economista ganador del Premio Nobel en 1986. En 1977, junto con Richard Wagner, publicó un libro que tituló Democracy in Deficit. Su tesis principal, profética, consistía en que las políticas fiscales de corte keynesiano, aunadas al cortoplacismo natural de los políticos, y en ausencia de cotas institucionales rigurosas, conducirían a privilegiar el gasto público, financiado con deuda adicional, no con impuestos. Así ha sido en general, no únicamente en nuestro país. El problema es que el endeudamiento encuentra límites, tarde o temprano, y entonces se revela lo inescapable: no hay más que una forma de financiar el gasto gubernamental: impuestos (explícitos o escondidos) hoy, o impuestos mañana.
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El 22 de agosto la SHCP publicó un documento muy importante, que intituló "Medidas para continuar fomentando la transparencia en las finanzas públicas". (Me ahorro el largo subtítulo). Digo importante, entre otras razones, porque contiene varias series históricas relevantes, que abarcan tres lustros. Los comentarios que siguen, y las gráficas que los acompañan, tiene su sustento numérico en los datos del documento referido.
Para dejar en claro responsabilidades, conviene recordar que en materia de gastos, ingresos y deudas del sector público federal, el poder ejecutivo propone, pero la última decisión depende del poder legislativo.
La Gráfica 1 permite una ojeada a la trayectoria del gasto (neto total) de 1999 a 2015, y permite algunas observaciones sumarias.
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-Entre 1999 y 2007 es evidente una suave tendencia general al alza.
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-Pero en 2008 se registró un ascenso abrupto; el incremento pronunciado se repitió un año después. En contraste, el cociente gasto/PIB se estabilizó durante el trienio siguiente.
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-El ascenso se reanudó a lo largo de los tres años más cercanos al actual.
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-En total, de 1999 a 2015, la fracción referida aumentó unos nueve puntos porcentuales.
Supongo que el "brinco" del gasto público ocurrido en 2008-2009 tuvo su racionalización en el intento de estimular la demanda interna, para "compensar" el impacto negativo de la Gran Recesión Mundial. El problema consistió en que, pasada la crisis, el gasto no se redujo.
Los ingresos presupuestarios también crecieron de manera notable en el transcurso de los tres quinquenios considerados (de 18% del PIB a 24%), pero...
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