Georgina González / La verdad sospechosa

AutorGeorgina González

Gracias al doping, el deporte olímpico navega dentro de una "verdad sospechosa".

En Seúl 88 aparece Ben Johnson "Jijo del doping" y se suena a Carl Lewis "hijo del viento", sólo que hizo trampa, la medalla acabó en manos de Lewis que siguió cosechando medallas y a quien años mas tarde le fueron detectadas hormonas del crecimiento, sin embargo no estaban prohibidas en ese entonces así que la libró.

EU dominó el atletismo de velocidad, llegaban, veían, vencían y celebraban. Hasta que el antidoping empezó a mejorar sus investigaciones y sus persecuciones. A partir del caso de los laboratorios BALCO el número de casos "BALCO-neados" fue de récord y a toda velocidad el atletismo de velocidad fue envuelto en una gran duda y una mayor mancha.

Marion Jones, campeona olímpica cuyo esfuerzo se proyectaba como ejemplo a seguir para la juventud, hoy nos impacta tras estar presa seis meses por haber mentido en el uso de sustancias prohibidas. Aquel rostro que reflejaba la alegría de ser parte de la gloria, luce demacrado por haber sido parte de un infierno. Ojo, su castigo no fue por recurrir al doping, fue por mentir bajo juramento en su país. Por mentirle al deporte también debiera recibirse un castigo pero este no siempre llega. Aunque unos acusan a otros y todos dudan de todos, entre denuncias e investigaciones se ha logrado sancionar a los tramposos, sin embargo estos son parte de un mensaje que ha querido evadirse por parte del Gigantismo Deportivo. Los atletas también son mensajeros de que los valores del deporte han sido tergiversados. Mientras no se le pegue a la...

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