Genaro Lozano / Derechas

AutorGenaro Lozano

En todas las democracias hay movimientos sociales que impulsan cambios, generalmente para ampliar libertades, y reacciones conservadoras que buscan detenerlos. En el estudio académico de los movimientos sociales, se ha encontrado que a todo movimiento corresponde un contramovimiento, de igual magnitud, pero en sentido contrario, como en la Tercera Ley de Newton. Académicos como Clarence Y. H. lo han estudiado estos fenómenos en Estados Unidos y advierten sobre el poco interés que generan los contramovimientos, que generalmente son de derechas populistas.

En México hemos visto un despertar de contramovimientos de derechas. En el 2016, Peña Nieto presentó un paquete de iniciativas proderechos humanos para personas LGBT que detonó movilizaciones de miles de personas en todo el país bajo el autodenominado Frente Nacional por la Familia (FNF), al que he llamado Frente Nazional anti Familias desde entonces. El FNF sepultó las iniciativas de Peña. El FNF como contramovimiento fue exitoso y basándose en una narrativa del miedo y engaños (Peña y los LGBT quieren destruir a la familia tradicional) movilizó la intolerancia y la homofobia.

Recientemente esas mismas coaliciones de derecha se han unido y movilizado en varios estados bajo la "Ola Celeste" para detener la liberalización del derecho a decidir. También se han unido a legisladores evangélicos para presentar iniciativas de "Pin Parental" para prohibir la educación sexual en las escuelas. Es el mismo FNF con otra cara, aprendiendo de cabildeo y uniéndose con empresarios, con el PES, PAN y algunos aliados de otros partidos.

Lo mismo ocurre en la derecha institucional partidista. Desde el 2018 el PAN quedó dividido entre Ricardo Anaya con su candidatura presidencial y el exilio de los Calderón-Zavala. La salida de ambos sirvió bien para demostrar el verdadero empuje y alcance de su apuesta electoral. Las encuestas que ponían a Zavala como puntera para la elección presidencial de ese año, pronto se evaporaron cuando la vieron y oyeron en acción y entendieron que era una excelente candidata, pero para competir por la presidencia de la asociación de padres de familia del Asunción, no por la Presidencia de México. Aún así, la división de la derecha partidista persiste, mientras que el destino de México...

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