Genaro Lozano / Ciudad igualitaria

AutorGenaro Lozano

El hijo de una amiga va en una secundaria muy fifí, por usar el término de moda, en la Ciudad de México. Recientemente salió del clóset y para su familia no fue siquiera tema. Sin embargo, su salida del clóset abrió una discusión en su escuela en torno al acoso escolar. El chico era bulleado por otro compañero, quien también acosaba a una compañera por su sobrepeso. Mi amiga preocupada me llamó para pedirme apoyo y dirigí su caso al Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México (Copred).

Una mujer le contó a un colega del trabajo que está embarazada. Al día siguiente la mandó llamar su jefe, la sentó en la oficina, le llamó la atención por haber llegado 5 minutos tarde y le dijo que las "cosas ya no estaban funcionando", que preferían terminar la relación laboral y que le darían un par de semanas de liquidación. La mujer sospecha que la despiden por estar embarazada y no sabe qué hacer.

Historias así ocurren todos los días en la CDMX. A pesar de que tenemos las leyes más avanzadas del país en combate a la discriminación, no tenemos una ciudad libre de ella. Todos los días se presentan casos de discriminación, a todos los niveles. En oficinas del gobierno, en el transporte público, en empresas, en la calle, en escuelas públicas y privadas, en restaurantes que no permiten la entrada a hombres tatuados con playeras sin mangas o en pizzerías que corren a una mujer transexual que quería festejar su cumpleaños ahí.

Desde el 2011, el Copred es la institución encargada de hacer que las leyes aprobadas en materia de igualdad y no discriminación sean una realidad y de atender a las víctimas de la discriminación. Tan solo en el 2017, Copred atendió a 1501 víctimas de discriminación y capacitó a más de 2500 en temas de igualdad y no discriminación. El Copred es hoy un referente latinoamericano de instituciones que combaten la discriminación y funciona muy bien.

El éxito del Copred se debe a un muy buen diseño institucional, pero también al liderazgo de Jacquie L'Hoist, la presidenta del Consejo desde su creación y quien dejará el cargo el próximo 12 de octubre. Jacquie supo armar un buen equipo de colaboradores, pelear por presupuestos para el Consejo, defender a víctimas y trabajar de la mano con múltiples organizaciones de la sociedad...

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