Gancho al hígado

(Embargada para sitios en internet hasta las 24:00 horas locales)La mejor pelea del añoJosé SulaimánEL UNIVERSALLa semana pasada fue de una inmensa tristeza en mi vida. Yo acostumbro enviar todos los años tarjetas de Navidad a muchos amigos con los que he convivido y de quienes tengo sus direcciones, como un recuerdo afectuoso de amistad. Muchos de ellos corresponden. Recibí, entre muchas tarjetas, cinco que me llegaron al corazón: eran familiares de mis amigos avisándome que habían fallecido en meses anteriores.Mi corazón palpitó al ritmo de los tiempos del pasado, de nuestra compañía, aventuras y vientos que ya nunca volverán. Que descansen en paz Lyman, Willie, George, Falo y Jorge, con quienes, quizá ya cerca, por allá nos veremos.Hace una semana en San Antonio, Texas, se celebró la pelea Chávez-Rubio, que es considerada por muchos como la pelea del año, porque ambos salieron a disputar palmo a palmo la victoria, sin ceder, sin jabs ni florituras, sin descanso, sin ir para atrás, sin bailar, sólo con la furia de dos grandes peleadores mexicanos que caricias no hacían.El triunfo para Chávez fue indiscutible y muy aplaudido, pero también la entrega total de Rubio, quien perdió con dignidad, como pierden los hombres. Que lástima que el grupo de Rubio haya manchado con protestas, de las que el mismo Rubio se desligó, al reconocer públicamente su derrota y se hizo a un lado de esos alegatos que hicieron sus promotores, lo que le dio más valor a esa pelea que quedará para la historia, entre dos "leones" mexicanos, como han quedado las de Rubén Olivares con Chucho Castillo; la de Carlos Zárate con Alfonso Zamora; Rafael Herrera con Rodolfo Martínez; Vicente Saldívar con Ultiminio Ramos; el trío Casanova, Conde, Zurita; Israel Vázquez y Rafael Márquez; Eric Morales y Marco Antonio Barrera; y tantas otras que me llevaría mucho describir.Chávez cambió esa noche su táctica y técnica para evitar que Rubio fuera hacia el frente con su devastadora derecha, dando a cambio tres minutos cuerpo a cuerpo durante 12 rounds de incansable batalla. Chávez calló muchas bocas y se confirma como el auténtico campeón mundial listo para enfrentarse a todos. Su defensa del título ante Martínez, que tanta gente exige y quiere ver, lejos de proclamar ser fácil para Martínez, el sábado pasado se comprobó que será una batalla que el campeón sabrá resolver con los pantalones de un mexicano que a nada ni a nadie teme, como lo demostró en San Antonio. Se lee que su...

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