Un fruto toda versatilidad
| Autor | Julieta Rodríguez |
¿Cree que la uva se hizo sólo para comerse así, al natural? ¡Claro que no!
Aunque no parezca, la uva es una fruta muy versátil con la que se pueden elaborar platillos, desde una sencilla ensalada hasta un fricasé de codorniz con uvas y almendras.
Esta fruta, además de ser sabrosa, también es nutritiva, pues ayuda al alivio o mejoramiento de algunas enfermedades.
"Las uvas son el fruto de la vid, en forma de granos más o menos redondos, de color morado, negro o verde, de pulpa acuosa y de sabor dulce o ácido. Sus semillas son ricas en proteínas y grasas", indica Alma Laura Zendejas de Lozano.
Además, es importante para la alimentación de los niños, pues les da energía y les ayuda a reponer las calorías gastadas en sus juegos, así como a las personas que desarrollan un intenso trabajo físico o intelectual, mujeres embarazadas y para las que están amamantando.
Esta fruta contiene cerca del 11 por ciento de glúcidos solubles y cantidades importantes de ácido cítrico y de ácido mólico.
"El consumo de uvas en su temporada es excelente para renovar el organismo, para depurarlo y para corregir el estreñimiento", recomienda.
Las uvas suelen consumirse tanto al natural como en forma de uvas secas (pasas) o en jugo, por lo que sus elementos nutritivos no sufren modificación alguna.
Sin embargo, en los casos de personas muy delicadas del aparato digestivo y en los niños muy pequeños, es preferible ofrecérselas hervidas, aunque por este procedimiento de cocción, la fruta pierde un 25 por ciento de agua por evaporación, sus proteínas se coagulan y eliminan por el calor, se pierde el 45 por ciento de las sales minerales y se destruyen las vitaminas.
"Solamente las grasas y los hidratos de carbono se conservan totalmente (al ser hervidas las uvas)", explica Zendejas de Lozano.
Aparte de consumir las uvas directamente al natural, también son ideales para preparar pasteles, mermeladas, salsas, platos fuertes, ensaladas y compotas, entre otras cosas.
"Ya mezclada en los platillos, la uva es perfectamente digerible, pero si la consume seca, en forma de pasa, se produce una concentración de hidratos de carbono (azúcar).
"Además, constituye una excelente fuente de calorías (las uvas pasas), aunque es menos digestible que la uva fresca", añade.
El comer la uva fresca tiene su chiste, pues masticar el grano nada más lo suficiente para consumir el jugo es un error; es preferible hacerlo hasta que la piel y las pepitas queden bien trituradas.
Otra manera de...
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