Frontera Invisible/ Novedosa revolución sexual en EU

AutorSergio Muñoz Bata

Los revolucionarios no dudan.

La ignorancia, los miedos, la censura, la religión y las leyes intentan inhibir la sexualidad natural de niños, niñas y adolescentes sin considerar el daño que les causan y de la inutilidad de su empeño.

La sociedad, dicen los promotores de la liberación sexual infantil, debe aceptar que los deseos sexuales de los niños son legítimos y que quienes quieren explorar naturalmente sus instintos deberían poder hacerlo libremente, sin consideración alguna sobre la edad de los participantes.

Además, dicen, aquellos adolescentes que desearan tener experiencias sexuales con adultos deberían poder hacerlo libremente, sin temor a las leyes que lo prohíben.

Estas son algunas de las atrevidas tesis que la escritora Judith Levine y el profesor de la Universidad de Missouri Harris Mirkin, entre otros, promueven en Estados Unidos. Levine, quien lleva muchos años escribiendo sobre sexualidad infantil, recién ha publicado un libro en el que advierte sobre los peligros que crea proteger a los niños del sexo. Mirkin es un profesor cuyo futuro en una universidad de Missouri está en peligro dadas las críticas de un grupo de padres de familia, líderes eclesiásticos y políticos locales que considera subversivas sus tesis.

Sostener ideas controvertidas como éstas nunca ha sido fácil. Hacerlo ahora, justo cuando las revelaciones sobre sacerdotes católicos pederastas minan la autoridad moral de la Iglesia católica y generan un debate encendido sobre el abuso sexual, presenta riesgos mayores.

Quienes están en desacuerdo con Levine y Mirkin señalan que estas tesis condonan el abuso sexual de un adulto (por ejemplo un sacerdote) contra un menor. Por el contrario, los autores de esta propuesta sostienen que es precisamente el escándalo en la Iglesia católica el que obliga a diferenciar entre la perversión de un sacerdote que amparado en su autoridad moral viola a un menor de edad y una relación sexual por consentimiento mutuo, por ejemplo, entre un joven de 19 años y una joven de 15.

Lo que habría que defi nir, por supuesto, es qué se entiende cuando se habla del concepto del llamado "consentimiento mutuo". ¿Qué significa, por ejemplo, que una niña de 13 años decida tener relaciones sexuales con un joven adulto de 23 años? ¿Sabe realmente lo que está haciendo y las posibles consecuencias de sus actos?

Hace apenas un mes, una Corte falló en...

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