Desde la Frontera Norte / Lagunas sobre 'trata'

AutorJorge A. Bustamante

Continúo con las referencias que hice sobre la reunión en la sede de la ONU en Nueva York, llamada "Nuevo diálogo sobre Migración y Desarrollo". Con esta entrega sólo cumplo pero no termino.

La idea original de esa reunión se vio diluida hasta la inocuidad, por la fuerza de la reacción de los países de recepción de las migraciones internacionales, encabezada por la delegación de Estados Unidos, que estuvieron en contra aun del menor de los cambios a favor de la protección de los derechos de los migrantes. Se había propuesto la creación de un "foro" que estuviera integrado orgánicamente a la ONU, que se encargara de sacar del estancamiento los objetivos para los que fue creada la Convención Internacional para la Protección de todos los Trabajadores Migratorios y de sus Familiares en 1990, estancamiento provocado por la resistencia de los países de recepción de las migraciones a ratificar ese ordenamiento que ha sido ratificado sólo por países de origen y por ninguno de recepción. Las razones por las cuales esto es así son las mismas por las cuales la reunión del "Nuevo Diálogo" fue un fracaso por lo que respecta a cambios a favor de los migrantes. Sólo quedó la evidencia de que los países de origen tendrán que ser más imaginativos para pensar en la manera de que sus migrantes salgan de las condiciones de vulnerabilidad extrema que están interesados en mantener los países de recepción -por cierto, incluyendo a México-.

Uno de los casos de mayor urgencia respecto de las condiciones de vulnerabilidad extrema de inmigrantes como sujetos de derechos humanos, es el caso del tráfico y del contrabando a "trata" de niñas. Difícilmente se puede pensar en algo más abominable que forzar a una niña de ocho años a tener relaciones sexuales con un adulto. Esto pasa de manera creciente en muchas partes del mundo, pero donde podríamos hacer algo es en el caso del contrabando de niñas (y niños) de Guatemala, Honduras y El Salvador, a México. Ni siquiera tenemos un marco legal para que el Estado mexicano cumpla con la obligación legal que le impone el haber ratificado la Convención de la ONU de 1990 antes mencionada, misma que entró en vigor desde 2003. Basta imaginar los casos frecuentes de contrabando de niñas -algunas veces vendidas por sus propios padres- que...

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