Desde la Frontera Norte / Indiferencia (menos dos)

AutorJorge A. Bustamante

Finalmente, moví a la acción una conciencia. Resulta que recibí una carta del señor Raúl (que al pedirle permiso para referirme a su carta me pidió que no revelara sus apellidos) quien me dice que se sentía muy mal de leer acerca de tantos sufrimientos y violaciones de derechos humanos en contra de los migrantes indocumentados en Estados Unidos y no poder hacer nada personalmente contra eso, hasta que leyó uno de mis artículos en Reforma donde sugerí hacer un boicot selectivo en contra de los productos de la empresa Kimberly-Clark, bajo el criterio de que, el principal accionista de esa empresa es nada menos que el congresista de Wisconsin, James Sensenbrenner, quien es autor del proyecto legislativo más antiinmigrante y más antimexicano de todos los que se discuten actualmente en el Congreso de Estados Unidos, y de que tal boicot selectivo es una acción legal y pacífica, a la que tenemos derecho como consumidores y que es admitida como legítima, tanto en las leyes de Estados Unidos como en las de México. Me dice en su carta que él ya empezó a dejar de comprar los productos de esa empresa y que con eso, ya se siente que está haciendo algo, mientras la idea es aceptada por otras personas de su círculo social cercano a quienes se las ha comentado. Cuando menos ya estoy seguro de que somos dos los mexicanos que estamos haciendo algo concreto como protesta por el tratamiento tan injusto que reciben en Estados Unidos los trabajadores migratorios mexicanos.

Es muy oportuno empezar a sumar conciencias en estos días en que en Estados Unidos, numerosas "organizaciones de oriundos" -como se llaman a sí mismos los que se han organizado allá alrededor de una misma comunidad de origen en México- están convocando a una serie de nuevas marchas de protesta contra los proyectos HR 4437 o proyecto Sensenbrenner y el S2611, aprobado por la Cámara de senadores de aquel país y, en favor de los derechos humanos y laborales de los trabajadores migratorios. Estas marchas son en Chicago el pasado 1o. de septiembre; en Fénix, Arizona el 4, en Washington, DC el 7. Para cerrar con una en Los Ángeles, que se espera sea la más grande, el 9 de septiembre. Como se sabe, los mexicanos de allá sí se están movilizando para actuar solidaria y pacíficamente a favor de los derechos de los migrantes. En los meses de marzo, abril y mayo, salieron a las calles a protestar por la misma causa, más de 2 millones de personas -entre migrantes y...

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