Mexicar/ Frontera no respetada

AutorEnrique Canales

La legalización de los carros contrabandeados, ahora llamados chocolate para aminorar nuestra vergüenza, nos lleva a dudar del que el país tenga en realidad una frontera. Yo acuso a los perredistas y al PRI de acabar con el sentido de frontera nacional como una línea de respeto. Pero tampoco creo que el PAN y menos el gobierno de Fox puedan recuperar el sentido de tener una frontera del país que se respete. Nadie, que yo sepa, incluyendo los panistas, zapatistas o anarquistas respetamos nuestra frontera.

Hablar de nuestra frontera nos envuelve rápidamente en una red de ilusiones. Mínimo los empleados de Hacienda se llevaron 2 millones multiplicados por 200 dólares, lo que es tal vez un carro nuevo por aduanal. No está mal, sobre todo porque ningún aduanal ha sido acusado de contrabandista, ni menos alguien ha terminado encarcelado. Mis cuates y yo como chiveros por 20 dólares le faltamos el respeto a la frontera. Por lo pronto Paco Gil debe sentirse jefe de empleados cómplices de los contrabandistas y yo les doy un año antes de que el mismo Paco Gil y Vicente Fox se conviertan también en cómplices aunque no lo quieran.

Si la frontera es traspasada hacia allá por millones de mexicanos, si es traspasada por millones de unidades de droga y de allá para acá pudo ser traspasada por 2 millones de automóviles además de millones de unidades de Sida, unidades de porno y de cajas de whiskey, eso quiere decir que la frontera es una barda que tiene menos de 70 centímetros de altura y de ella, en realidad, tan sólo nos quedó la ilusión.

Tenemos la ilusión de que existe una frontera muy marcada y definitiva; desde la escuela vemos en el mapa a los países iluminados con diferentes colores. La primera desilusión nos sucede cuando uno desde el camión se da cuenta que el monte tiene el mismo color. Hace tiempo viví a orillas del río Dordoña en el sur de Francia y al notar cierta diferencia de arquitectura en ambos lados del río, me explicaron que dicho río había sido frontera entre el territorio francés y el territorio inglés durante 300 años. Inmediatamente pensé en nuestro río Bravo, todavía no completamos 180 años de frontera y se tambalea el sentido de separación.

En otra ocasión, en una sesión de planeación dentro de una empresa industrial, preparamos unos acetatos con un inmenso mapamundi, con las fronteras que existían según los historiadores en el año cero de nuestra era, es decir, cuando Jesús tenía un día de haber nacido. Aclaración: los que...

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