FRONTERA INVISIBLE / El factor Palin

AutorSergio Muñoz Bata

Según los estrategas demócratas era de esperarse que, dado el conservadurismo extremista de la candidata, Palin reforzara la campaña de los republicanos en los estados del sur del país donde la derecha religiosa tiene una fuerza política desproporcionada. Y añaden que con cualquier otro compañero de fórmula de McCain que suscribiera a la letra la agenda cultural ultra, es decir que estuviera contra la legalización del aborto, contra el matrimonio entre personas del mismo sexo, contra cualquier restricción a la compra de armas, escéptico de la evolución y adepto al creacionismo, McCain habría logrado el mismo objetivo.

Fincados en esta certidumbre, ni Barack Obama ni Joseph Biden, el senador por Delaware escogido como candidato a la vicepresidencia por el Partido Demócrata, han lanzado sus críticas contra la Gobernadora de Alaska argumentando, no sin razón, que la contienda es contra McCain. Otra razón que aducen para su abstinencia verbal es que dicen estar seguros de que una vez que pase la novedad de su nominación, Palin misma se encargará de autodestruirse revelando sus debilidades.

Por si las dudas, los voceros no oficiales del partido no han escatimado sus ataques a Palin, a quien acusan de no estar preparada para el puesto y mucho menos para quedar a un paso de la presidencia si, agregan a sotto voce, algo fatal le llegara a suceder a McCain, quien, recalcan, si llegara a ganar la contienda, en enero de 2009 sería el Presidente más viejo en la historia del país.

En esta dirección, James Carville, quien fuera director de campaña de Bill Clinton en 1992, llega más lejos aún al asegurar que con la selección de Palin, McCain no solo ha cometido un error garrafal sino que lo hace justo cuando el país enfrenta tres guerras que no parecen tener final y sin percatarse de que con ello, tiran por la borda la supremacía que los republicanos mantuvieron durante los últimos 60 años como el partido con mayor experiencia en el tema de la seguridad nacional.

El cálculo de los demócratas, sin embargo, no está exento de riesgos políticos. En primer lugar porque parece menospreciar otras facetas de la personalidad de Palin, quien gracias a un fenomenal discurso en el que mostró su insólita y encantadora ferocidad tuvo un debut en el escenario político nacional que no pudo haber sido más favorable.

Pero eso no es todo, Palin es nueva en el ambiente...

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