FRICASÉ / Negro manto
Autor | El Abogado del Pueblo |
Triste reflejo sobre el ánimo de tolerancia predominante en nuestra antes ejemplar comunidad es el hecho de que enormes atracos y faltas de respeto hacia la comunidad y su bienestar no ameritan ya ni remedo de indignación.
Decepcionante es la respuesta (y la actitud) de muchos ciudadanos, quienes lejos de castigar con su desprecio hasta parecen premiar a quienes los han DESPOJADO de su arduamente ganado patrimonio personal en obras dispendiosas que huelen a enorme corrupción; ciudadanos que, además, han sido engañados burdamente con increíbles y osadas mentiras, rollos y actos de simulación cuyo único fin ha sido encubrir aviesas acciones que quebrantaron la hacienda pública.
A una LARGA lista de gastaderos-robaderos cuya presencia es ubicua y que hoy tienen postradas a las finanzas públicas -en sí fuente de inexplicables arreglos financieros que arrojan enormes beneficios para particulares y quebranto para los ciudadanos encubiertos además por la OPACIDAD- día a día se agregan más evidencias de agresiones contra el tesoro ciudadano sin que exista reacción alguna de los ciudadanos.
Motivan este comentario de hoy dos hechos recientes: por un lado, el resultado de encuestas de opinión que ha realizado este su periódico que evidencian la INEXISTENCIA de un voto de castigo, o censura, para quienes han perpetrado y quienes han ENCUBIERTO el que bien pudiera ser el SAQUEO más grande de dinero público en la historia de nuestro Estado; y, por el otro, la ausencia de extrañamientos ciudadanos respecto al SÍMBOLO de este saqueo: una edificación que domina en perpetua humillación el perfil del centro de Monterrey, "Elefante Blanco", "Barril Sin Fondo", "Agujero Negro" que es la mal llamada Torre Administrativa.
Construida a un enorme costo quesque para acomodar parte de la inútil, onerosa y excesiva BUROCRACIA estatal.
Desde su arranque esta obra ha estado plagada de las IRREGULARIDADES más aberrantes que se hayan visto en esta comunidad, acompañadas éstas de las más grandes MENTIRAS y engaños a los ciudadanos, entre ellas que la obra sería "autosuficiente" y que el Estado se "ahorraría" cientos de millones de pesos anuales al no tener que "rentar" edificaciones y que mejoraría el "servicio" al ciudadano, algo medio difícil de realizar estando VACÍA.
Como este periódico lo demostró: la torre está costando varias veces lo que se dijo en principio, no está terminada y no representa para el Estado ni ahorro ni beneficio alguno, antes al contrario.
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