Frenesí Político / De actitudes y perspectivas trascendentes

Hace más de 20 años, cuando transcurrían los últimos de vida de Fundidora Monterrey -intervenida ya por el gobierno federal para tratar de salvar aquella importante fuente de trabajo-, teníamos a nuestro cargo el área recreativa y cultural de la empresa y afrontábamos una vez más el agobiante recorte presupuestal para nuestras actividades.

En una reunión memorable con directores, gerentes y jefes departamentales, el entonces Director General Jorge Leipen Garay, al comentar el recorte a nuestro presupuesto, dijo en tono solemne: "les recuerdo a todos ustedes, y en especial al maestro Sosa (por haber sido nuestro presupuesto el más afectado) que el dinero no lo es todo en la vida... -y remató acto seguido con sentido del humor- sólo el ciento diez por ciento".

Para concluir la anécdota, vale recordar que ese año aguzamos el ingenio e hicimos participar a más trabajadores, ajustándonos al magro presupuesto recortado.

Recordamos el suceso hoy, cuando vemos las reacciones opuestas de Fox y de López Obrador ante el recorte a sus presupuestos del 2004.

Mientras el Presidente de la República dedica todo su tiempo y esfuerzo a injuriar a la mayoría de diputados que decidieron no gravar más a la población y votaron por no modificar mayor cosa los impuestos actuales, el Jefe del Gobierno capitalino expresó que él estaba de acuerdo con la decisión de los diputados que sólo le autorizaron endeudar al gobierno del Distrito Federal por 500 millones de pesos, en vez de los 2 mil 500 que él pretendía, y que continuaría con su incontenible programa constructivo lo que resta de su gobierno. Son dos posiciones opuestas que delinean los perfiles de personajes de nuestra política, ubicados en grupos de...

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