Firme a sus 56 años

REFORMA / Redacción

Cumple 56 años al sol, a la sombra, a la lluvia, a las "movidas", a darle entrada al que quiera; desde hace algún tiempo tiene sus "arruguitas", nada que no haya remediado una "manita de gato" por aquí y por allá de vez en cuando.

Doña Plaza México festeja este día un aniversario más, con Eulalio López "Zotoluco", Enrique Ponce, Julián López "El Juli", Leopoldo Casasola y toros de Xajay y Reyes Huerta en el cartel, y hoy es tan segura, o insegura, y tan la más grande y cómoda, o incómoda, del mundo, como el primer día.

Su apariencia exterior nunca ha sido bella, mucho menos con los detallitos que el tiempo ha traído, pero el sabor y la tradición que encierra el inmueble, son innegables.

"Una obra tiene un servicio de 70 años, entonces, con el paso del tiempo, si no hay mantenimiento frecuente, empieza a demostrar el deterioro", expresa el arquitecto Alfonso Santarrosa, con 16 años de experiencia en estructuras de inmuebles, quien acompañó a REFORMA en un recorrido por el Coso.

"Cuando pasa ese tiempo, el concreto empieza a sufrir el deterioro por el salitre, por la exposición a los cambios, al sol, al viento, a todo; entonces se empieza a deteriorar", agrega Santarrosa, "pero la única forma de saber si realmente hay deterioro o no, y en qué grado, es elaborando un dictamen derivado de pruebas de resistencia en diversas partes del edificio".

La Delegación Benito Juárez, donde se encuentra ubicada la Plaza, exige que cada tres años se lleve a cabo un dictamen pericial de la estructura del escenario para autorizar el permiso de apertura, aunque Ernesto Herrera, presidente de la Comisión de Protección Civil de la Asamblea Legislativa, reconoce que no se ha sistematizado el registro de los mencionados dictámenes.

El inmueble es objeto de remozamientos y pintura cada año desde la última gran obra en el Coso, que tuvo lugar en 1989, antes de su reapertura.

Miguel Angel Medrano, también arquitecto y especialista en Protección Civil, acota que la Plaza México fue construida con la tecnología más avanzada en su momento.

"Casi la mitad de la estructura de la Plaza descansa en el subsuelo", comenta Medrano, "es decir, está sólidamente sostenida y con el paso del tiempo se le han incorporado numerosos refuerzos de concreto".

La inspección visual muestra que las columnas de soporte, sobre todo en la parte posterior, donde no se permite el acceso al público, demuestran signos de deterioro en el concreto, e inclusive, en algunas de...

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