Fiesta a medias

AutorÓscar Sánchez

La música que acompañó a los Tigres camino al vestidor al término del partido de anoche, fue la misma que escucharon durante los pasados seis meses: abucheos.

Toda la expectación que causó la renovación que sufrió el club en todos los niveles, y la pretemporada exitosa, se estrelló contra el orden de un también renovado Puebla, que se fue a casa con un valioso punto en la bolsa.

José Luis Sánchez Solá y sus pupilos se encargaron de agüitar la fiesta a los fieles aficionados felinos que, como siempre, se avalanzaron sobre los abonos al comprar más de 30 mil y provocar el lleno en el Estadio Universitario.

Un abucheo moderado se escuchó cuando Francisco Chacón decretó el final y el 1-1 lucía en la lujosa pantalla del Uni.

"Es el primer partido, aún les faltan jugadores, yo creo que sí la van a hacer", dijo Sandra Galicia, aficionada que vive en Mitras Centro, al término del encuentro. "A Itamar le faltó un poquito más de punch y Toledo falló mucho".

El conjunto poblano, uno de los semifinalistas del torneo anterior, se fue adelante gracias a un penal que concretó Carlos Ruiz al minuto 54.

La primera mitad había sido toda del conjunto poblano, ya que poco le prestó el balón a los felinos, situación que apaciguó un poco a la tribuna, ya que, salvo los "Libres y Lokos", el resto parecía observar nerviosamente cómo su equipo era dominado.

"¡Dale, negro, dale, negrooo!", cantaban los "Libres" cuando Itamar fue derribado en los linderos del área, falta que Lucas Lobos cambió por gol en el cobro.

Los hinchas ahora sí cambiaron su postura y el apoyo fue más intenso, pero el transcurrir de los minutos fue...

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