Fiesta de amor y terror

Como costal de Santa Clos, la Navidad siempre tiene muchas cosas buenas que llegan como sorpresa, o como algo que ya esperábamos. Sin duda, ésta es la mejor época del año así como la más especial para chicos y grandes...

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  1. Es una Fiesta que Une a la Familia y los Amigos

    Ninguna otra fecha como la Navidad une tanto a las personas; es el momento para celebrar, visitar a la familia, llamar a los amigos y, sobre todo, decir a todos -regalo o no de por medio- cuánto los amamos.

  2. Los Reencuentros

    La Navidad siempre es un buen pretexto para pedir u otorgar perdón, olvidar alguna pelea familiar o reconciliarse con el amor. O, por qué no, darle la sorpresa a ese familiar y amigo que por meses o años hemos tenido en el olvido.

  3. Los Regalos

    No importa la edad que se tenga, siempre se espera con ilusión un regalo, que, más allá de su valor, representa la materialización de un buen deseo, el saber que alguien pensó en nosotros y lo eligió con cariño. Sin embargo, no sólo el recibir nos hace feliz, pues también regalar es una experiencia enriquecedora, que comienza desde el momento que escogemos el objeto e imaginamos la cara del destinatario al momento de abrir su obsequio.

  4. La Comida

    Si por algo se distingue la cocina mexicana es por su gran variedad de sabores, variedad que en esta época se deja ver en todo su esplendor. Nadie puede resistirse al pavo, los romeritos, el bacalao o los tamales. La cena de Noche Buena se convierte en una fiesta al paladar.

    ¡Y los postres!, no podemos dejar fuera los chocolates, pastelitos, buñuelos, todo se vale comer en estos días.

  5. Las Compras

    El salir de compras, ver los aparadores, buscar algún objeto que alegrará a algún familiar o amigo, eso también es parte de la celebración...

    Pero por qué pensar sólo en los demás, también es un buen momento para consentirnos, cambiar el guardarropa o hacernos un regalo especial.

  6. Se Perdonan los Excesos

    No cabe duda que la temporada se presta para todo tipo de excesos. Si gastamos, comemos o bebemos de más, ¿qué importa?, ¡es Navidad!

  7. Las Fiestas

    La familia, los amigos, los compañeros de la oficina, los ex compañeros de la universidad, la prepa, la secu, la primaria y hasta los del kínder aprovechan para organizar algún convivio. Los vecinos que durante el año ni te saludan, ahora vienen a invitarte a degustar los buñuelos y tamales de la abuela. Así que, de principio a fin, diciembre se convierte en una fiesta inacabable.

    ... aunque el Grinch tal vez no estaba...

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