Rafael Fernández de Castro / Elocuencia vs. estrategia
| Autor | Rafael Fernández de Castro |
Es mucho lo que está en juego en la elección del próximo 2 de noviembre en los Estados Unidos. Pero la disputa entre ambos candidatos es esencial: las actuaciones de Kerry en los debates contra la sofisticada y altamente negativa estrategia de campaña de George W. Bush.
El demócrata tiene que cerrar con broche de oro el tercer debate del próximo miércoles. Necesita llevar a cabo una actuación igual o mejor que la que dio en el primero, en el que logró deteriorar la imagen de Bush. Pero a partir de esa noche, el estratega de Bush, Karl Rove, tendrá aún 20 días para asaltar con toda la artillería negativa a Kerry.
Los demócratas engañaron con la verdad. Kerry es un gran cerrador de campañas y es formidable para debatir. Efectivamente, cuando parecía que su campaña se derrumbaba, pues los demócratas no alcanzaban más que a defenderse y Bush gozaba de una cómoda ventaja de siete u ocho puntos en las encuestas, llegó el primer debate y Kerry regresó a la pelea.
Bush apareció en el primer debate decidido a noquear al candidato demócrata. Eligió el tema de seguridad nacional, pues era en el que se sentía más seguro. Pero Kerry no sólo aguantó, sino que lastimó al actual comandante en jefe. Insistió con elocuencia en su ataque al presidente: "estamos solos en Irak porque Bush desprecia las coaliciones". También aceptó algunos errores como el votar en contra de una autorización extraordinaria de fondos para la guerra en Irak, lo cual fue tomado como una buena dosis de algo que ha escaseado en la imagen del demócrata, humildad. Los analistas, incluso los conservadores, no dudaron en declarar a Kerry como el claro vencedor.
En el segundo debate Bush omitió sus caras de pujo e insistió en presentarse como un tipo sencillo, honesto y con agallas. Kerry, también bien preparado, atacó a su contrincante acusándolo de gobernar para los privilegiados, pues recortó los impuestos de los que ganan más de 200 mil dólares al año. Además, en las preguntas difíciles -sobre el aborto y el cultivo de tejidos a partir de embriones- se creció, contestándolas con inteligencia y sensatez.
El contra ataque republicano
Al gran estratega se le reconoce en las elecciones cerradas. Y esta es justamente la gran cualidad de Karl Rove, el ya legendario estratega electoral de Bush. La elección presidencial del 2000 la ganó por escasos 537 votos en el estado de Florida. Como consultor de campañas, Rove mantiene un récord impresionante: 34 victorias por 7 derrotas.
Rove es conocido...
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