Feria en incertidumbre
| Autor | Israel Sánchez |
A sólo cuatro días de que arranque la Feria Internacional del Libro (FIL) del Zócalo, los detalles de su programación aún son un enigma.
Si bien en años anteriores el programa se ha dado un par de días antes de la apertura, editores independientes, promotores de la lectura y otras figuras del gremio denuncian desorganización, un mal augurio para la edición 19 de un encuentro librero del que hasta ahora sólo hay una cosa segura: la reducción de foros.
"Siempre había una región invitada, un país invitado, una temática (...) Y este año no hay nada", asegura en entrevista Mariana Rodríguez, presidenta de la Asociación de Escritores de México (AEMAC).
Este 2019, la asociación que preside Rodríguez fue despojada de un foro que tenía a su cargo desde 2015 en la FIL, en el cual realizaban mesas de lectura y presentaciones, incluso con escritores internacionales.
Según fuentes consultadas por REFORMA, los foros habrían quedado reducidos a sólo cuatro para esta edición: dos de gran formato y dos más pequeños -uno que funcionará como un café literario y otro dedicado a las propuestas independientes-, esto debido a una presunta poca afluencia.
"En la última reunión que yo tuve con Ricardo Bautista (coordinador de la FIL), me dijo que eran cuatro foros, y en uno había 360 horas para que se las pelearan quien fuera", comparte Jocelyn Pantoja, editora de Proyecto Literal, quien lamenta la situación de los sellos independientes para esta nueva edición.
"Hay un cierto encapsulamiento de las editoriales independientes al sólo permitirles que compitan por el espacio independiente, cuando otras editoriales tienen otros foros que se pueden repartir", opina, por su parte, Alejandro Baca, editor de Cuadrivio.
Baca y Pantoja, ambos miembros fundadores de la Liga de Editoriales Independientes (LEI), lograron afianzar un par de presentaciones en la feria, pero condenan la poca disponibilidad de espacio, que parece será parcialmente destinado a universidades y a los programas gubernamentales.
"Se redujeron los foros y eso provocó que obviamente falten espacios; de por sí siempre era difícil conseguir, ahora más.
"Es un problema, y más que nada porque esos espacios que antes eran para las editoriales se los están dando a proyectos del Gobierno, los PILARES, que tienen su parte buena, son importantes, pero de cualquier manera no hay que sacar de vista que al final la feria del libro es para los editores y para los libros", expone Baca.
Cuestionado sobre el avance de...
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