Felipe Díaz Garza/ Otro vendedor de ilusiones

AutorFelipe Díaz Garza

El gasto federal en publicidad y propaganda es un tema muy controversial, pues a través de él se busca la creación o la restauración de la imagen presidencial y su consecuente proyección al pueblo. Este asunto ha provocado discusión siempre, no tan sólo hoy que el Presidente Fox y los suyos pretenden abiertamente que las erogaciones por este concepto constituyan una partida presupuestal muy importante.

El jefe de prensa del Gobierno siempre ha sido mal visto por el público, que en esta actividad percibe una expresión más de dispendio o corrupción gubernamental. Mas la polémica se radicaliza hoy porque el Gobierno actual es panista y este renglón del gasto público de los Gobiernos priístas era, precisamente, uno de los más criticados por los panistas cuando eran oposición.

La controversia por supuesto se centraba entonces, con los priístas, y se centra hoy, con los panistas, en determinar si se justifica o no se justifica una inversión gubernamental que muchos califican como cosmética, aunque no falten quienes la consideran justa y necesaria.

Es difícil despejar esa incógnita en un país tan pobre como México, ante cuya ciudadanía, mayoritariamente pobre y hasta extremadamente miserable, el Gobierno pretende aparecer bien maquillado y mejor arreglado, con la ensoñadora ilusión, expresada personalmente por Fox, de "comunicar para mantener la llama de la esperanza encendida, para poder inspirar que sigamos adelante y para poder motivar".

En la misma ocasión y lugar donde dijo lo anterior, el Mandatario también aseveró que, ahora que es el inquilino de Los Pinos, se ha dado cuenta de que su antecesor, Ernesto Zedillo, tuvo importantes logros y avances, pero nunca tuvo la habilidad para comunicarlos a los ciudadanos.

En los últimos días se ha agregado otro punto álgido a la discusión pública de este tema. Me refiero al uso del tiempo de transmisión "gratuito", que está a disposición del Gobierno en los medios de comunicación radiales y televisivos.

Aparentemente, el presupuesto foxista de imagen no contemplaba usar ese tiempo propiedad del gobierno, por lo que los opositores al gasto cosmético argüían que se desperdiciaba un recurso gratuito disponible. La vocera de Fox, Martha Sahagún, acabó anteayer con esta línea de discusión, al informar que sí se utilizará este tiempo, además del que se pretende contratar, de acuerdo con los planes gubernamentales al respecto, que consumirán mil millones de pesos.

Y le digo que hay que agregar ese costo...

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