Felipe Díaz Garza / Literatura en la Tesorería
| Autor | Felipe Díaz Garza |
El tesorero municipal, Ricardo Garza Villarreal, parece estar preocupado por el monto de la deuda contraída por la actual administración, que se incrementó en un 130 por ciento durante el primer año del ejercicio. La preocupación del funcionario se ha manifestado en su proposición de pagar pasivos, mas no a través de entregas en efectivo destinadas a la redención de obligaciones, sino por la vía de la reestructuración, recurso más literario que bursátil que sin duda está de moda en el modernismo financiero.
Garza Villarreal pagará más con menos, dice, y lo hará en el mismo plazo. También el tesorero estatal, Rubén Martínez Dondé, ha optado por el enfoque artístico de la deuda nuevoleonesa actual y venidera, a través del mismo esquema reestructurador de fantasioso origen literario.
No se confunda. Que uno y otro tesorero reestructuren deudas existentes y futuras no quiere decir que hagan lo mismo, sino sólo que los dos han decidido cambiar los términos en que las obligaciones se contrajeron. Así, por ejemplo, el tesorero municipal ha propuesto a su Cabildo que la deuda de 753 millones de pesos, contratada con Banobras, vea reducidos de su valor actual los abonos periódicos para irlos aumentando gradualmente, a lo largo de los 15 años que ya están pactados como plazo, al mismo tiempo que se establece una tasa fija de interés de 11 por ciento.
Según el esquema actual, para cambiar el cual pidió anteayer el tesorero la licencia del Cabildo, misma que le fue concedida, los pagos son mayores ahora que en el futuro, y están sujetos a la volatilidad de la tasa de interés interbancaria de equilibrio (TIIE). El tesorero municipal sentenció que: "Por un lado, los pagos deben ser crecientes porque el día de mañana y dentro de cinco años y dentro de diez voy a tener mejores ingresos, y por otro, es mejor una tasa fija porque la TIIE varía y si hay turbulencias políticas o problemas económicos, va para arriba".
El Tesorero del Estado ha propuesto al Congreso y éste lo ha autorizado a que conciba un Instituto de Control Vehicular, que colocará títulos, que serán respaldados (pagados, más bien) por los ingresos del estado por el rubro de refrendo vehicular de los siguientes 30 años. Con ese dinero, ocho mil 877 millones de pesos, Martínez Dondé pagará o refinanciará parte de la deuda del estado, exceptuando la de Agua y Drenaje, que a todos los nuevoleoneses nos conviene deberla, dice el guión de la telenovela, pues prácticamente nos pagan intereses por...
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