Felipe Díaz Garza / Aquí no pasa nada

AutorFelipe Díaz Garza

El Presidente Peña Nieto y su Secretario de la Función Pública tienen más razón de la que les conviene cuando proponen que la corrupción en México es parte de la cultura. Los males son difícilmente combatibles, pues están consolidados en los códigos genéticos de conducta del mexicano.

Con ese argumento el Presidente y su defensor de oficio promueven que el mal es incurable, justificando así su incompetencia para erradicarlo.

Hay que insistir en que la corrupción no se limita al manejo deshonesto de la hacienda pública o al "mal gobierno" en abstracto, término que los mexicanos usamos a menudo, a veces, como en 1910, con final revolucionario, para quejarnos de quienes nos mal gobiernan.

La incompetencia, la irresponsabilidad y la consecuente falta de resultados, aunque no sean "con mala intención" sino por cultura, definen también a un gobierno corrupto, como lo han sido la mayoría de los gobiernos mexicanos.

En ese marco, una de las formas más generalizadas de corrupción del poder público es el ocultamiento sistemático de la verdad, que nuestros gobiernos han perpetrado a lo largo de la historia del México independiente, que arrancó con Agustín de Iturbide, no con Jaime Rodríguez.

Los gobiernícolas ocultan la verdad como si estuvieran respirando, pues el impulso natural de su corrupta condición es ocultar, incluso aunque la información tapada no dañe sus planes y proyectos y hasta cuando la apertura real de la verdad podría beneficiarlos.

En ese contexto debemos revisar los esfuerzos del actual Gobierno para mantener a raya a los organismos internacionales como Naciones Unidas, Amnistía Internacional y hasta la misma Corte Penal Internacional de La Haya, a cuyos dictámenes sobre violación de derechos humanos se les niega oficialmente validez por cuestiones de formula sintáctica.

El 31 de marzo del 2015, el Gobierno mexicano reconoció que se oponía a aceptar que la tortura era una práctica generalizada, como advirtió el Relator Juan Méndez, por la connotación del término en el derecho internacional.

"Nos oponemos porque la situación que se vive en...

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