Entrevista/ Luis Felipe Bravo Mena/ 'La Transición Está Incompleta'
| Autor | Ernesto Núñez |
MURAL / México
Hace un año su escritorio en la sede de Angel Urraza estaba lleno de encuestas, análisis electorales, estrategias de campaña y propaganda política.
Hoy, el despacho del presidente nacional del PAN tiene otro aspecto. Hay sobre la mesa proyectos de Gobierno, iniciativas inconclusas y una propuesta de pacto político que pretende responsabilizar a los partidos con la transición.
No hay un teléfono rojo, como lo había en las oficinas de la dirigencia priísta, pero sí existe, según asegura Bravo Mena, la posibilidad de hablar con el Presidente y con cualquier Secretario de Estado en el momento que sea necesario.
¿Cómo ve en este momento la transición?, ¿considera que está estancada?
Le falta al proceso de transición un acuerdo político que nos permita conducir la nueva gobernabilidad democrática; que implica distribución del poder, que nadie lo tiene concentrado; que implica equilibrios y una pluralidad activa como nunca antes en la historia del país, y todo esto exige corresponsabilidad por parte de todos los actores.
Esto no ha acabado todavía de entenderse plenamente entre todos los actores políticos. Por tal motivo, en estos primeros días, porque hay que verlo así en un proceso histórico, en estos primeros días en la fase de democracia y la nueva gobernabilidad que esto implica, sí nos falta a los actores asumir plenamente la corresponsabilidad de la nueva etapa que está viviendo el país.
En estos siete meses de gobierno, ¿cuáles considera que hayan sido los momentos más difíciles?
Momentos particularmente graves no he visto. He visto situaciones inéditas que han necesitado de mecanismos no previstos para irlos resolviendo. Uno de los más delicados fue el conflicto preelectoral de Yucatán, donde parecía que por momentos se rompía el pacto federal y hubo necesidad de que las instituciones actuaran con energía, y que se impusiera un mínimo de sensatez en quienes por razones absolutamente sectarias intentaban romper el orden constitucional.
¿La marcha zapatista?
No vi la marcha como un momento crítico; al contrario, la vi como una muestra de lo nuevo que está pasando en México. Que pudiera darse este acontecimiento con toda libertad, es una vivencia plena de la pluralidad. Vi como un hecho muy positivo que pudiera tenerse un debate sobre varios aspectos relacionados con eso, creo que oxigenó enormemente la vida política. Y en lo que respecta al procesamiento de la reforma constitucional, lo veo como un hecho de la nueva realidad...
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