La famosa primera semana
| Autor | Oliver Zazueta y con información de Mario Abner Colina |
Es usual que la línea entre arte y mercadotecnia genere una discusión, así sucede en la cinematografía mexicana, que a la luz de lo que parece ser una excepción a la regla, -el éxito inusitado de la comedia Nosotros los Nobles- ha traído una discusión respecto a la cuota de pantalla que las producciones nacionales tienen en las cadenas exhibidoras.
La taquilla del primer fin de semana de exhibición dicta la permanencia de los filmes, esto para algunos es un flagelo y para otros son las reglas.
"La versión oficial es que Cinépolis y las cadenas grandes de exhibición, que ahora ya sólo hay dos en México -la otra es Cinemex, que recientemente adquirió los complejos de Cinemark en el País-, es que tratan de dejar las películas dos semanas o más. En la práctica, regularmente las dejan una semana y las quitan", explicó Estrella Araiza, socia de la distribuidora Vendo Cine, que promueve películas hechas en México.
"La ponen una semana en el Distrito Federal, si la película va bien, la sueltan a nivel nacional, si no la quitan. Si la primera semana tienes 3 mil espectadores por copia significa que le va ir muy bien, si tienes menos de mil, no. Las películas independientes, casi todas, tienen menos de eso".
Para Miguel Rivera, director de programación de Cinépolis, es justo que la audiencia tenga la última palabra en cuanto a si un filme es exitoso o no, y aseguró que todas las cintas tienen la misma oportunidad de ocupar todos los horarios de sus salas.
"Si el primer fin de semana no tiene por lo menos un resultado medianamente aceptable, la película definitivamente no tiene oportunidad de permanecer, independientemente de la nacionalidad que tenga", declaró Rivera.
"Hubo (en el 2012) muchas películas que no tuvieron buenos resultados y no fue por un problema de espacio en las salas. Morelos fue una película que costó, según cifras extraoficiales, cerca de 80 millones de pesos, y aunque salió en 200 cines hizo menos de 3 millones de pesos. Son increíbles esos resultados".
Sin embargo, hay otra versión del asunto, el documentalista Everardo González asegura haber sufrido una mala jugada de Cinépolis durante la única semana de exhibición de su documental Cuates de Australia, -en el estreno sacaron su película de las salas que se habían acordado-.
"Tuvimos un lanzamiento pequeño de 17 copias, entonces todas nuestras campañas se dirigieron a los públicos cautivos de los circuitos convenidos. El problema es que esos circuitos son convenidos de palabra"...
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