Exhiben lucha por expresión
| Autor | Yanireth Israde |
Un escritorio huérfano, símbolo del periodista que no volvió a la redacción para escribir su artículo, destaca en la muestra "¡No nos callarán! Las batallas por la libertad de expresión", que inaugura hoy el Museo Memoria y Tolerancia (MMyT).
Más de 73 periodistas fueron asesinados por su labor reporteril desde 2000, indica Antonio Martínez, miembro de Artículo 19, organización que presenta la exposición junto con Propuesta Cívica y el recinto de Plaza Juárez, que dirige Linda Atach.
La colección, primera en su tipo, reúne fotografías o testimonios de ataques a instalaciones de periódicos como El Siglo de Torreón -una imagen en escala casi real-; Mural y El Norte, de Grupo Reforma, y El Mañana, de Nuevo Laredo, entre muchos otros. También se incorporan videos con testimonios de los reporteros y páginas o emisiones relacionadas con las agresiones.
Si bien la muestra abarca medios de diversas entidades y posturas, faltan muchos, pues la "geografía del silencio", como la llama Sergio Aguayo, presidente de Propuesta Cívica, se expande según la ruta del crimen organizado.
"El espacio fue una limitante, tenemos 350 o 400 metros cuadrados, es muy poco. Para presentar una muestra exhaustiva del calvario de los periodistas y los medios se necesitaría -y no voy a exagerar- un espacio del tamaño del Zócalo: esa es la magnitud del problema", apunta el politólogo.
La propuesta museográfica coloca en primer plano a las personas que producen la información, señala Atach, aquellas que únicamente se conocen por su nombre en el crédito.
De ese interés se desprende un collage con las fotografías de los 73 asesinados: los que no regresaron para escribir su artículo.
El escritorio es una recreación, pero contiene una amenaza real, detalla Martínez. La recibieron Pedro Matías Arrazola, corresponsal de la revista Proceso en Oaxaca y Giovanni Vásquez, conductor del noticiero radiofónico Sin muros.
El martes 30 de abril de 2013, Vásquez encontró en su teléfono celular este mensaje:
"Que paso pendejo ya bajale de wevos porque te los vamos a cortar y dile a ese pendejo que luego handa llorando y no entiende con sus notas varatas y esta vez no llegara ni Alemania".
El texto no menciona a Arrazola, pero refiere un viaje que en 2010 hizo el comunicador a Alemania, donde se le entregó un reconocimiento por su labor.
"De alguna manera queremos emocionar al público con este escritorio", comenta Atach, "es un espacio de trabajo que muestra cómo la persona dejó inconclusa su...
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