Evoluciona, al fin, rescate de Goeritz

AutorIsrael Sánchez

Lo que inició como una aventura vecinal se convirtió en una odisea que al fin vislumbra su término: el rescate de La pirámide, obra que el artista Mathias Goeritz erigió en los 70 en la Unidad Habitacional Torres de Mixcoac a petición de sus proyectistas, Abraham Zabludovsky y Teodoro González de León.

A más de un año de haber arrancado las gestiones, la restauración apenas registra un avance del 70 por ciento, cuando originalmente se preveía que tomara sólo 11 semanas.

La causa principal del retraso, como ha documentado REFORMA, han sido los múltiples obstáculos interpuestos por parte de la asociación civil que administra el conjunto residencial.

"Ha sido por gente que detiene (la restauración); por la asociación civil que la detiene como si fueran ellos los dueños del lugar. Pero no, somos nosotros, los condóminos", dice en entrevista Emmanuel Manrique, dirigente del comité ciudadano que impulsa el rescate realizado con fondos obtenidos a través del programa Ollin Callan de la Procuraduría Social (Prosoc) de la Ciudad de México.

Así, los trabajos liderados por Jaime Gutiérrez Islas -subcontratado por el Patronato de la Ruta de la Amistad, entidad que brinda asesoría en la restauración- fueron frenados en múltiples ocasiones, apelando, entre otras cosas, a cuestiones de seguridad, como la necesidad de contratar un seguro de daños a terceros.

"Todo eso ya lo teníamos cubierto desde hace más de un año", relata Manrique. "Nunca dieron una razón de peso para no acabar el trabajo. (Decían) que no eran buenos restauradores. Fue un trabajo de resistencia de` Juan Ocampo (arquitecto y vecino de la unidad) de estar dialogando y dialogando, como si tuviéramos que pedir permiso, cuando es de toda la comunidad esta escultura".

REFORMA publicó que los administradores de la unidad eran apoyados por la Fundación Mathias Goeritz A. C., asociación constituida en 2017 y que registró el nombre del arquitecto como marca a pesar de no tener ninguna relación con él.

En una asamblea vecinal celebrada el 9 de febrero de 2019, Silvia Arraut, abogada de Daniel Goeritz, hijo único y heredero universal de los derechos del arquitecto

-posicionado a favor de la restauración-, remarcó ante los condóminos que tal fundación no tenía ningún derecho para autorizar o prohibir nada relacionado con la obra de su padre.

A pesar de esto, la fundación presidida por el arquitecto Jorge Zamora Barajas solicitó al Instituto Politécnico Nacional realizar un dictamen de daños en la...

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