Everardo Elizondo/ 'La sombra siniestra del pesimismo'

AutorEverardo Elizondo

Préstamo (literario)

Tomé prestado de alguna obra el título de este artículo, pero al momento de escribirlo no conseguí recordar la fuente (¿una frase de Vargas Llosa?). Lo uso como quiera porque tiene una sonoridad atractiva, y porque describe bien el ambiente que prevalece hoy en día.

En el exterior, se oyen cada día con más fuerza los clarines de guerra, cuyo ruido ha empezado a ensordecer aun a los destemplados alegatos de la diplomacia. En el interior, los requerimientos elementales de la economía parecen subordinados a las exigencias de la política. (Por ejemplo, pragmáticamente hablando, en la situación semirecesiva actual resultarían inoportunas fricciones adicionales entre México y Estados Unidos).

Indicadores (en EUA)

Mientras tanto, las cifras preliminares recién publicadas sobre la evolución de la economía norteamericana prestan base a la revisión a la baja que se ha hecho de las previsiones. El panorama de corto plazo no se presenta muy brillante. Los datos referentes a la producción manufacturera se han debilitado en las últimas semanas. En un plano anecdótico, pero revelador, una gigantesca compañía de automóviles acaba de anunciar que planea reducir su producción en 10 por ciento durante el segundo trimestre, en relación con el nivel del mismo periodo del año pasado. Los índices de precios en los mercados accionarios siguen moviéndose "hacia el sureste" -como ha dicho con pudor un analista internacional. La tasa de desempleo aumentó ligeramente. Y así por el estilo.

Perspectivas

Dicho lo anterior, conviene notar que las perspectivas económicas para Estados Unidos se sintetizan actualmente más o menos como sigue: el PIB crecerá algo así como 2.5 por ciento (a tasa anualizada) durante el primer semestre, pero el ritmo se acelerará en la segunda mitad, alcanzando entonces quizá 3.5 ó 4 por ciento. Tal expectativa resulta curiosamente optimista, considerando los sombríos elementos descritos antes. Sin embargo, no hay que olvidar que la opinión mayoritaria entre los analistas puede caracterizarse en los siguientes términos: I) tanto la política monetaria como la fiscal presentan hoy una posición extremadamente expansionista; II) la recuperación ya está en marcha, aunque sea titubeante; III) es posible que la guerra con Iraq no sea corta ni fácil, pero la economía norteamericana ha probado ser muy resistente a los choques externos (terrorismo); y, IV) el ciclo de baja inversión parece haber terminado.

Ciertamente, no todo mundo...

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